Que No Sepan Que Puedes Ver

💫08💫

ELSA ARENDELLE

Nada de esto estaría sucediendo si no fuera por Agnarr. Todo es culpa de padre y su estúpido orgullo. Al salir de la ducha me vi al espejo y pude notar que mis ojos eran claros, como al primera vez que los volví a ver, desde que padre me había inyectado esa cosa he sentido como mi interior se enfrió tanto que mis ojos tenían un tono mas oscuro. Esto era mucho mejor.

Cuando me reuní con los muchachos comimos en silencio antes de iniciar la conversación. —Mi padre fue un imbécil cuando se caso con mi madre, él estaba tan ocupado en complacer a su padre para heredar la compañía que descuido a madre y ella encontró el cariño y la atención en otro hombre. Un beta.—cuando empecé a contar sentí como todos detenían sus cubiertos.— Ese otro hombre la hacia feliz, le daba el lugar que merecía y la respetaba por sobre todas las cosas, cuando llego el celo de madre; Agnarr estaba tan ocupado como para ayudarla, ella salió del castillo y busco al beta, durante cinco días estuvo con el viviendo en las profundidades del bosque, llegando a la orilla del clan Dumbroch y La Familia Fa.—

—Cuando regreso olía diferente y padre se enfado demasiado, su orgullo como alfa había sido dañado por lo que el busco al beta; llegaron a la pequeña cabaña en donde el vivía bajo el cuidado del Alfa Fergus, el cumplía su trabajo como el mejor guerrero.— dije deteniéndome un poco ya que no quería repetirlo. —Cuando padre llego enfurecido con todos sus guardias el alfa Fergus lo tomo como una amenaza; padre quería matar al beta por acostarse con su esposa pero Fergus no veía justo eso así que se decidió en una pelea, por desgracia el beta no tenia oportunidad.— me levante dando unas cuantas vueltas por el lugar.

—Madre empezó a presentar síntomas de embarazo y padre estaba listo para matar a la cría, con tal de que eso no pasara madre accedió hacer cualquier cosa con tal de que padre tuviera clemencia. Su condición fue que cuando cumpliera el año y no se presentara como alfa seria enviada al bosque para que sobreviviera sola; una cría entre un omega y un beta fue una sorpresa ya que la mayoría no llegan a termino y ponen en riesgo ambas vidas.— siguió Anna. —Madre tenia miedo así que fue a varios lugares a pedir ayuda, algo que pudiera asegurar que fuera alfa. Llego a una cabaña en el bosque de una vieja que parecía loca, ella le dijo que debía subir toda la montaña y presentará sus respetos a los espíritus, madre, con duda hizo el viaje.— cuando termino me volteo a ver.

—Ella no debía hacer esfuerzos pero aun así subió. Al llegar se arrodilló y pidió que el bebé naciera alfa, a cambio de eso ella les daba su vida. Fue entonces que empezó a llover con fuerza y el cielo se iluminó de azul, un rayo le cayo justo encima dejándola inconsciente durante varias horas, cuando se levanto estaba rodeada de flores blancas y sintió el vientre helado, fuera de eso ella estaba bien. Cuando nací con seis meses tenia el cabello blanco y madre supo enseguida que eso era una buena señal, aparte de que mis ojos eran iguales a los de su difunto amor. Cuando me presenté como alfa y aparte de eso tenia un poder increíble concedido por los espíritus padre intento hacer que nadie lo supiera. Cuando cumplí tres años nació Anna; años después mientras jugábamos  la lastime por accidente, padre estaba enfadado conmigo mas que nada porque tenia la misma mirada del hombre al que había matado y solo buscaba una excusa para hacer lo que hizo, claro y sin olvidar que el detestaba saber que era por mucho mas fuerte que él. El me inyecto algo que durmió a mi lobo de manera indefinida y sello mi poder, todo eso fue cuando tenia diez años.— termine antes de volver a sentarme. —Cuando fui creciendo el se aseguro de mostrarme mi lugar y tu también lo hiciste Honeymaren. Cuando le dije sobre mi pareja supo que era alguien con un gran potencial y sabia que tarde o temprano me levantaría en su contra para ir a buscarla, solo por eso hizo todo esto y accedió dejarme salir. La vieja en el bosque nos mostró la verdad y me dijo que mi lobo no era como todos los demás, sino que era el supremo alfa, el primero en tener una pareja predestina en mas de diez años. Dijo que era un milagro que no haya muerto el día del rayo; parece que los espíritus vieron la pureza en el corazón de madre.— termine.

Todos estaban congelados sin saber que decir pero fue el curioso de Olaf en hablar.—¡ASOMBROSO!— por primera vez en años me reí con fuerza por lo importuno que fue.

Por primera vez en años me sentí libre.

Después de nuestra comida fuimos al lugar que menciono Kristoff y encontramos a una de esas cosas como de 50 cm de largo comiéndose el cadáver de un hombre. La gente que conocimos en el bosque lo capturaron y enjaularon, revisamos el lugar y antes de partir volví a escuchar ese aullido, esta vez era de sufrimiento, ella esta herida.

Me enoje y de inmediato corrí hacia el pueblo sintiendo como Kristoff y Honey subían a las motocicletas. ¡MATARE A QUIEN LA HAYA LASTIMADO!

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—¡HOLA! ¡¿HAY ALGUIEN AQUÍ?! ¡NECESITAMOS AYUDA!— Luisa empezó a gritar con fuerza pero nadie respondía. Empece a olfatear tratando de buscar si había algo parecido a una farmacia o clínica y di con ella. —Nos están observando, no son como esas cosas, son personas.— dijo Dolores doblando muy poco la cabeza para señalarnos con los ojos un callejón. —No me importa, vamos, encontré una clínica.— en cuanto empezamos a caminar podía notar el sin fin de presencias que estaban aquí, llegamos al lugar acomodando rápidamente a Camilo en una mesa y ver que tenia la pierna rota y mucho dolor —Dolores, revisa si tiene costillas rotas.— dije y enseguida se puso a su lado acercando su oreja a su torso mientras el chico respiraba pausadamente y apretaba con fuerza los ojos. —Si tiene, conté siete, aparte de que tiene dislocado el hombro y la pierna rota.— gruño Dolores y por un momento sentí el dolor en sus palabras, se estaba culpando por lo ocurrido.