Ａｍａｒｉｓ | ʀᴏʙɪɴ ʙᴜᴄᴋʟᴇʏ

run boy run

Run boy run! This world is not made for you
Run boy run! They're trying to catch you
Run boy run! Running is a victory
Run boy run! Beauty lays behind the hills

Yoann Lemoine

- Tenemos que irnos- comencé a caminar para el otro lado y me di cuenta que ninguno me seguía- ¡Ahora!

- Qué pasa? ¿Qué es eso?- preguntó Robin confundida.

- Eso- Steve apuntó hacia atrás mientras seguía caminando- es un portal a una dimensión alterna a la nuestra.

- ¿Y cómo están tan seguros de eso?- Robin se acercó a preguntarme y yo solo respondí con una mueca- ¿Ya lo habían visto?- nos preguntó.

- Algo así.

- ¿Algo así?

- Piénsalo de esta manera- explicó Dustin- podría causar el fin de la humanidad.

- ¿Cómo es que saben todo esto?- volvió a preguntar Robin hasta que Erica llamó nuestra atención.

- Steve, ¿Dónde está tu amigo el ruso?- unas alarmas comenzaron a sonar así que corrimos. Steve abrió la puerta donde estaba el portal y un par de rusos nos miraron raro pero nosotros solo seguimos de largo.
Dustin no dejaba de insultar al aire y yo me sentía cada vez más cansada de correr.
Llegamos a un punto en el que no se podía seguir corriendo.

- ¡Mierda, mierda, mierda!- Dustin se escuchaba desesperado.

Estábamos demasiado cerca del portal así que antes de seguir por ese camino, nos fuimos por el otro.

-¡Guardias!- ni siquiera pude distinguir quién dijo eso. La adrenalina y el cansancio no me dejaban pensar con claridad. Me sentía en modo automático.
De repente vi una habitación vacía.

- ¡Por aquí!

Una vez que entramos y cerramos la puerta, podíamos escuchar a los rusos luchando por entrar. Teníamos que correr.
Erica encontró uno de los ductos de ventilación, eso sería una buena salida.
Dustin, Érica y yo la abrimos y dejamos que ella pase primero.

- ¡Vamonos!- le gritó Dustin a Steve y Robin.

- ¡No, huyan ustedes!- Steve forcejeó un poco- ¡Váyanse!

- ¡No, vengan!- pedí- lo lograremos si vienen rápido.

- Mierda, Amaris. Ve por ayuda, alguien debe quedarse con los niños.

- Estaremos bien, Amy. Lo prometo- dijo Robin intentando sonreír. Dustin ya se había ido al grito de "nunca los olvidaré"  así que solo quedaba yo.

Una vez que entré comencé a murmurar para mí misma que me mantenga alerta y que cuide bien a los niños. Debía cuidarlos bien.

Los tres seguimos avanzando por el ducto para rescatar a Steve y Robin y encontrar una salida. Pan comido.
Mientras Dustin cortaba algunos cables para poder apagar el aire acondicionado y pasar tranquilos, le contábamos a Erica todo lo que habíamos pasado el último año.
Ella creyó casi todo. Menos que Lucs estuvo involucrado en todo esto.
Dustin estaba tardando bastante con esos cables.

- Ok, si no paramos el aire acondicionado, y no buscamos ayuda, tus amigos morirán, nerd.

- Esta vez ella tiene razón, Dustin- concordé con Erica- los chicos están en peligro.

- Entiendo que quieras ir a rescatar a tu amado Steve, Amaris, pero lo tengo controlado, solo confíen- ¿él acababa de decir eso? Dustin cree que estoy enamorada de Steve desde que nos conoció. Estaba terriblemente equivocado.

-¡No vas a salvar a nadie con esa actitud, idiota!

- hey, hay que ser realistas. Avanzamos 500 metros en 9 horas- Erica siguió explicando su cálculo. No. Puede. Ser.

- ¿Calculaste todo mentalmente?- ella solo asintió.

- ¡Eres una nerd!- gritamos Dustin y yo al mismo tiempo. Erica se veía confundida.

- Tú. Eres. Una. Nerd- Dustin remarcó cada palabra.

- Retractate, nerd.

- Oh, Erica. No puedes escapar de lo nerd. Lo he intentando y fracasé.

- Examinemos los hechos- habló Dustin- Hecho número uno: eres una genio matemática.

- Hecho número dos: sabes mucho de política- ennumeré yo esta vez.

- Hecho número tres: amas My Little Pony.

- Oh eso no lo puedes negar, nerd- y señalé a su mochila.

De repente mi cabeza volvió nuevamente a donde estábamos. La vida de Robin y Steve estaba en peligro con cada minuto que pasaban hablando.

-Volvamos a lo que estábamos- me pedí a Dutin- por favor.

Dustin logró desactivar los ventiladores. Y a la mierda la ayuda, los rescataríamos nosotros mismos.

Luego de estar un buen rato buscando una salida, logramos bajar por una de las rejillas del ducto a una habitación llena de las cápsulas que estaban en el ascensor.

Dustin se quedó mirando a un punto fijo. Un pequeño auto.
Él quería conducirlo. No pude ser.

- Yo manejaré, soy la mayor.

- ¿Siquiera sabes cómo hacerlo?- me cuestionó Erica.

- Max lo hizo. No puede ser tan difícil, ¿cierto? Aparte sé un par de cosas que Steve me enseñó.

Luego comenzamos a buscar la llave de repuesto. Erica decidió que sería una idea genial cargar un arma probablemente letal para freír comunistas.

Cuando por fin encontramos la habitación en la que los tenían, había un extraño señor dentro. El espíritu de Steve salió de  dentro mío y ataque al ruso en la cabeza con el arma.

- ¡Henderson, Amy!- gritó Steve- estábamos hablando de ustedes.

Con los demás niños, comenzamos a cortar las cuerdas que los rodeaban.
Mientras cortaba las de Robin, ella pareció tener una alegría repentina.

- ¡Amy! Sí viniste por nosotros- ella solo agarró mis mejillas entre sus manos y me dio un pequeño beso- sabía que vendrías- sus ojos estaban igual de brillantes que la primera vez que nos besamos.

Ninguno de los otros tres había visto lo que había pasado y yo tampoco iba a mencionarlo luego.

- Bien, prepárense para correr.

buenass, cómo va??