《❀》25《❀》

319 39 6
                                    

Una joven beta se mantenía en su lugar mientras escuchaba la respiración de un desconocido a través de una llamada telefónica, cuando había respondido, solo intercambiaron unas cuantas palabras

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una joven beta se mantenía en su lugar mientras escuchaba la respiración de un desconocido a través de una llamada telefónica, cuando había respondido, solo intercambiaron unas cuantas palabras.

—¿Bueno?

—¿Te has enterado?

—¿Quién eres? ¿y enterarme de qué?

—ya sabes... enterarte de la verdad

Sin embargo la llamada nunca finalizo y por un cierto presentimiento decidió no colgar primero, unos segundos despues esa misma voz volvió a hablar pero provocando un gran escalofrío en el cuerpo de la chica.

—Si quieres dejar de ser la marioneta de los demás, nos vemos en dos meses en la fiesta para negocios, estas invitada, yo lo se, te estaré esperando y será mejor que pienses lo que harás hasta esa fecha, de lo contrario voy  intervenir antes

La llamada finalizo y solo se escuchaba el sonido de que había sido cortada. La joven de cabellos morado, se fue a sentar aun con miedo en todo su ser, sirvió un poco de agua en un vaso y trato de tomar un poco para poder relajarse, aun que eso no la haría estar del todo tranquila.

━━━━━ • ஜ • ❈ • ஜ • ━━━━━

Pronto se acercaba el mes donde nacería el hijo o hija de Teru Minamoto y Aoi Akane, bien se sabia que en estos ultimos meses Akane tenía más riesgo con el embarazo, pero incluso con eso en mente, el omega pelirrojo no dejaba esa actitud fuerte que lo caracteriza, a casi poco de cumplir sus nueve meses, estuvo en su habitación encerrado, pues por naturaleza había creado un nido, de ahí la razón por la cual, Teru estuvo un tiempo fuera de casa, pues ni bien ponía un pie en la casa, era atacado por un tenedor o cuchillo para mantequilla volador, según su madrastra y amiga omega, cuando los omegas crean nidos son zonas de confort para ellos y su próxima cría y cualquier persona puede ser un enemigo para ellos, básicamente, hasta Teru que es su esposo, contaba como enemigo para Akane, pero no por eso lo iba a dejar solo, todos los días se aseguraba de dejarle una bolsa con las compras para su querido pelirrojo.

Pasando el resumen de esos ultimos meses, vayamos a lo que es la actualidad.
En una habitación estaba una joven pelimorada, desde hace un tiempo recibía mensajes de números desconocidos, diciendo que pronto se enteraría de una verdad y que era mejor que se centrara en el conocer dicha verdad que en sus planes, cosa que si llego a alterarla, puesto que se suponía que nadie más conocía de sus actividades, más que su colaborador el señor Minamoto. Mientras pensaba en lo que ocurría en su vida, la joven se probaba un elegante vestido color índigo, de escote en forma V y falda en estilo princesa, su amiga de cabellos bicolor la ayudaba a arreglarse, pues en unas horas irían a la tan esperada Gala de Empresarios.

—Nene...

—¿mm?

—¿Por qué sigues ayudándome?

—somos amigas ¿no?

—....aun despues de lo que he hecho, ¿Me consideras amiga tuya?

—el daño ya lo has hecho, es tu decisión si continuas lastimando o buscas la forma de remediarlo

—¿remediarlo?

—no has hablado con Akane-kun ¿Verdad? Creo que ya va siendo hora de que ustedes dos se arreglen... o que al menos ya no haya mal entendidos

—¿Me perdonará? ¿Incluso por lo que pasará?

—¿Pasará?

La joven de cabellos morados se bajo del banco en el que se encontraba midiéndose el vestido para tomar a su amiga por los hombros y verla con una mirada de arrepentimiento.

—Nene hay algo de lo que debes saber...

[ .... ]

En un gran salón se encontraban varios empresarios y más famosos disfrutando de la gran velada, había invitados internacionales e incluso pequeños empresarios que recién entraban al negocio. Algunos invitados se robaban la atención del lugar, claro, hablamos de la pareja más hablaba de todos los tiempos, Minamoto Teru y Akane Aoi, quienes eran centro de atención por el embarazo del omega, quien estaba a un mes o incluso semanas de dar a luz, todos en el lugar les felicitaban e incluso algunos daban regalos, pero claro, estos ya sabían del embarazo del pelirrojo. 

En una esquina del salón en la planta alta, se encontraba un hombre Alfa, acompañado de su esposa, ambos, padres del rubio que tenía la atención del publico, el señor tenía a su esposa a un lado, la mantenía callada, pues en sus "ideales" los y las omegas solo eran una compañía, no tenían por que hablar u opinar a la hora de conversar, aun así, la mujer disfrutaba de la velada y veía con cariño a la pareja, en el tiempo que estuvo visitándolos, se había encariñado tanto con ambos jóvenes.

—¿Por qué los miras? Ni si quiera conoces al omega

—asiente— veía a mi hijo

—¿Cuándo entenderás que no lo es?

—....no importa sino somos sangre... Yo seré su madre hasta la muerte

El hombre no dijo nada y empezó a saludar a las personas que se acercaban con él.

El hombre no dijo nada y empezó a saludar a las personas que se acercaban con él

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

..

.

.

.

.

.

.

..

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

#Como les explico que el próximo capítulo va haber muertos y es final de la segunda parte de la historia?

Sale, se me cuidan :D
Bye bye

En la relación... Mando YoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora