It's gotta be you (Harry y tu- Segunda temporada)

Capitulo 22

Harry Styles.

“Yo no pienso lastimarte, yo te amo como a nadie y no quiero separarme de ti…”

Me sentía de lo peor. Ni siquiera debí aceptar la invitación de Maryane al cine. Con ella me divertía y sí, había cambiado; pero sabía que, aunque saliéramos como amigos, a Aly le molestaría y mucho. Soy un completo idiota, lo sé.

Cuando se encendieron las luces en la sala, nos levantamos y salimos de allí, Maryane caminaba a mi lado tomando mi brazo, algo que me incomodaba. No sabía si Alison ya se había ido junto con Louis, lo que sí sabía era que ella no estaba muy contenta por haberme encontrado aquí. 

— ¿Me esperas aquí? Necesito ir al baño – pidió Maryane, apenada; yo solo asentí y me recargué en la pared para esperarla. Respiré frustrado. Necesitaba llamarla, pedirle disculpas. Saqué mi celular del bolsillo trasero de mis jeans y busqué su número en mis contactos, al encontrarlo presioné el botón donde decía “llamar” y puse el celular en mi oreja.

Comenzó a dar línea, uno… dos… tres… cuatro…

— Hola – me sobresalté al escuchar su voz – en este momento no puedo contestarte, deja tu mensaje y regresaré tu llamada, gracias. – y corté. Dios… pasé mi mano por mi cabello, despeinándolo y volví a suspirar frustrado, impaciente, no sabía no como me sentía en este momento. Volví a marcar su número y rogar porque me respondiera. No lo hizo, era de esperarse, sentí una mirada fija en mí, guardé el celular de nuevo en el bolsillo de los jeans, y levanté la mirada. A unos metros de mí, justo enfrente, estaba una chica junto con otro chico. Entrecerré los ojos su cabello rojo sobresalía por debajo de su gorro, sus ojos oscuros estaban clavados en mí, mientras el chico le hablaba. Comencé a caminar hacia ella, chocando torpemente con las personas que pasaban por enfrente de mí. ¿Quién era ella? ¿Por qué no dejaba de mirarme?

— ¡Harry! – escuché que me llamaban a mis espaldas, volteé y era Maryane quién me miraba confundida. Volví mi mirada al frente, y la chica ya no estaba. Comencé a buscarla con la mirada por todo el cine, pero era imposible encontrarla. - ¿Pensabas irte sin mí? – me miró ofendida.

— No, no… es que… me pareció ver a alguien. – sacudí la cabeza y la miré. – vamos, es hora de irnos. – la tomé de la mano y al darme cuenta de lo que hice, la solté inmediatamente. 

Subimos al auto y la llevé a su casa; le pedí que esperara antes de que bajara. Aclaré mi garganta.

— Necesito aclararte algo. – puse mi mano en su hombro y me miró curiosa.

— ¿Qué cosa? – sonrió.

— Emh… - bajé la mirada y luego la miré, suspiré. – No quiero que malinterpretes todo esto… - 

— ¿Qué…? ¿A qué te refieres? – parecía estar completamente confundida.

— Acepté tu invitación, porque la primera vez que salimos me divertí contigo… Somos amigos, lo sabes, ¿no? – le dije y ella asintió insegura. – Bueno… pues sólo eso seremos, y no creo que sea bueno seguir saliendo… mucho menos al cine, juntos, solos. – traté de ser claro y no cruel.

— Sí… lo sé. Me explicaste que tienes novia y… yo no quiero que ella se moleste, ni que tengan problemas por mi culpa – dijo honestamente.

— Gracias. – hice media sonrisa. – Nos vemos en el trabajo. – dije educadamente, para despedirla. Maryane asintió, abrió la puerta del auto y bajó para luego decirme “adiós” con la mano.

Esperé a que entrara a su casa y me fui.

(…)

— Te juro que no te mi intención… - le dije por milésima vez a Alison. Había ido a su departamento a aclararle todo, ya que no respondía mis llamadas. Ella estaba en pijama, al parecer las chicas ya estaba dormidas.