It's gotta be you (Harry y tu- Segunda temporada)

Capitulo 18

El despertador sonó. El ruido aturdió mis oídos, lo apagué y cerré mis ojos quedando profundamente dormida de nuevo. 

— Aly, Alison, ya se te hizo tarde. –

Escuché que decía alguien fuera de la habitación… abrí los ojos y tomé el celular. Me levanté inmediatamente al ver que solo me quedaban cuarenta minutos. En cuarenta minutos tenía que ducharme, arreglarme y desayunar, además que “British Style” no estaba tan cerca del departamento. Busqué mi ropa y salí de la habitación. Entré rápidamente al baño y me di una ducha de diez minutos.

— No puede ser, es mi segundo día de trabajo, y ya voy tarde. – salí con una toalla enredada en mi cabello y vestida. Entré a la cocina, donde estaban las chicas, desayunando, para después irse a la Universidad. Tomé una tostada y le unté mermelada. Le di una pequeña mordida, mientras quitaba la toalla de mi cabello y comencé a cepillarlo rápidamente.

— ¿Llegaste muy tarde anoche? – preguntó Eli.

— Un poco… pero me quedé conversando con él más tiempo. - Sequé de nuevo el cabello con la toalla cuando acabé de comer la tostada y tomé medio vaso con leche.

— Tuvieron su noche… - decía Neshmi alzando sus cejas.

— ¡Neshmi! – exclamé sonrojada. – claro que no. – recordé lo de anoche. Si él no hubiese querido parar, no sé que habría pasado… ¿a quien engaño? Sé perfectamente lo que hubiera pasado. Solté una risita.

— Y con esa risita quieres que te creamos. – bromeó Eliana.

— ¡Ya dejen de acosarme! – reímos y entré al baño, cepille mis dientes y luego entré a mi habitación para peinar mi cabello. Tomé mi bolso con un poco de dinero y mi celular. Me despedí de las chicas, el taxi ya había llegado, bajé las escaleras y salí del edificio. 

Al llegar a la Empresa, le pagué al taxista, ya eran cinco minutos tarde y estaba segura que Maryane me iba a poner a hacer trabajos extras. 

Entré al elevador y subí al cuarto piso, donde estaba su oficina y al llegar me atendió Chelsea en recepción.

— Llegas tarde. – advirtió anotando algo en una hoja.

— Si, ya lo sé… - contesté obvia. Me miró de mala gana y me dio una pluma para que firmara. Caminé a la oficina de Maryane, abrí la puerta y me di cuenta de que estaba con Harry. – Lo siento, no quise interrumpir. – estuve por cerrar la puerta pero la voz de Maryane me detuvo.

— No… pasa, necesito que hagas algo. – pidió y la obedecí. – Tendré un desfile de moda hoy, necesito que me ayudes a guardar mis vestuarios para llevármelos. – me miró de pies a cabeza. – están en el armario, tienes diez minutos y ya van dos perdidos. – advirtió y asentí. – Harry, entonces tenemos una cita – escuché que dijo antes de entrar al armario. Volteé y él me miraba sin saber que responder. Fruncí los labios y entré al armario, cerrando la puerta detrás de mí.

— Bueno… no es una cita. Es por el trabajo. – escuché que respondió Harry. Sentí un alivio. Comencé a guardar los vestuarios de Maryane en las maletas, y a los lejos se escuchaba la conversación que ella tenía con Harold.

— Sea lo que sea, es una cita, Harry. – por su forma de decirlo, estaba completamente segura de que trataba de seducirlo.

— Ehm… - Harry aclaró la garganta. – Bueno, llámalo como quieras. Apresúrate, se hace tarde. – fue lo último que escuché de su parte.

Seguí empacando las cosas y luego la puerta del armario se abrió.

— Date prisa, Alison. No quiero llegar tarde. – dijo mirando sus uñas.