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A la semana Lisa ya se había recuperado totalmente y volvió a la escuela. Pudo aclarar su mente y despejarse. Se sentía renovada para darle con todo a los estudios.

Al llegar a su aula r y saludar a sus amigas acomodo sus cosas en su asiento. Pero Jennie no llegaba.

Supuso que llegaría tarde, como era habitual, asique no se molesto por mandarle un mensaje.

Para su buena suerte, Minnie se había sentado con Nayeon, una amiga de Jennie

A los 10 minutos de que la clase ya había empezado Jennie llegó, con una sonrisa de oreja a oreja.

Lisa se preguntó el motivo de esta. Pero antes de que esta pueda emitir una sola palabra Jennie ya le estaba contando.

-¿Te preguntas por qué estoy tan feliz?

Lisa aguantando la risa asintió con la cabeza.

- Este viernes es mi cumpleaños.

- Mmh, lo sabía.

- Y como es mi cumpleaños, voy a hacer una fiesta, ya compre la mayoría de las cosas.

- Que genial, estoy contenta por ti.

- Y como tienes el privilegio de ser mi compañera de banco, también tienes el privilegio de ser a la primer persona que le de la invitación.

- Nunca me sentí tan privilegiada, Señorita Jennie Kim.- Dijo Lisa haciendo una reverencia en modo de broma.

Jennie rió y continuó hablando:

- Me debes de acompañar a comprar un vestido, o algo para ponerme, no tengo nada lindo.- Dijo haciendo un puchero- Y de paso algo para ti, así conquistas al príncipe de tus sueños.

Jennie al percatarse de lo que acababa de decir se puso roja de los nervios.

- O-o una pr-princesa.

Lisa rió e hizo un gesto despreocupado. Aunque si fue raro, y bastante.

La mañana transcurrió con total normalidad, hasta que en el almuerzo, Jennie iba a dar las invitaciones a su fiesta. Le pidió ayuda a Lisa, a Jisoo y a Nayeon.

- Jennie...

- Mhh.- Dijo esta mientras tachaba con un tic a quien ya le había dado la invitación.

- ¿Podrías invitar a Rosé? Es que no conozco ni a la mitad de las personas a las que invitas.

- Mhh, okey. Me cae bien, dale una tarjeta.

Lisa fue hasta donde Rosé se encontraba y le toco el hombro emocionada.

- ¡Adivina que tengo aquí!

- ¿Quep?- Dijo Rosé sumamente concentrada mientras jugaba un juego en su teléfono.

- ¡Una invitación para una fiesta!

- ¿De quien?- Dijo quitando sus ojos rápidamente de la pantalla.

-De Jennie, y ambas vamos a ir.

-¿Me invito a mi?

- Sip- Dijo la tailandesa sacudiendo la tarjeta frente a su cara en señal de que la tome y esta lo hizo.

Luego de la escuela acompañó a Jennie a elegir su vestido. Esta tienda era muy cara, claramente alejado de él presupuesto de Lisa.

- Mira este- Señaló Lisa un vestido corto, con brillos y pegado al cuerpo.

- ¿Para ti?¡Me encanta!- Dijo Jennie muy emocionada.

- Jennie, no tengo dinero para algo tan costoso.

- ¿Olvide mencionar que va por mi cuenta?

- No. No me lo vas a regalar.

-¿Quien me lo impide?

- Yo.- Dijo totalmente seria.

- Lisa, no te pongas así, sabes que a mi no me cuesta pagarlo.

- No Jennie, no necesito tu solidaridad, ni tu caridad.- Dijo Lisa algo enojada.

- Vamos, Lili, déjame hacerte un regalo.

- No.- Por más que a Lisa le enterneció este apodo, no podía aceptar un regalo tan caro.

Luego de esto, compraron un vestido azul oscuro, corto y con una sola manga para Jennie, el cual por cierto, le quedaba precioso.

A la noche, cuando Lisa ya estaba en su cama solo el timbre de su apartamento, el cual de mala gana fue a abrir.

Al abrir la puerta se encontró con un paquete y nadie cerca al llevarlo a su casa y abrirlo, vio que era una caja con el vestido que tanto le había gustado en la tienda con una nota que decía:

"Supuse que era tu talla, te va a quedar muy bonito. Por favor no me odies
                                          Jennie :)"

Nos Encontramos/ JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora