Capitulo 5

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Siento como mis ojos no quieren abrirse pero a la vez deben hacerlo.

Se supone que hoy Jacob me va a mostrar lugares de la Ciudad de Miami, así que me comienzo a estirar. Una pierna luego un brazo y otro, hasta que por fin estoy levantada, reviso la hora de mi teléfono y son las nueve de la mañana.

Me voy al baño y es cuando me estoy cepillando que escucho que abren la puerta de mi cuarto y tocan la del baño.

-¡Aurora!-me comienza a llamar Alba.

Le abro la puerta con el cepillo aún en la boca, le hago señas para que me diga lo que me quiere decír.

-Jacob ya vino a buscarte y tu todavía no estás lista-Me lo dice muy rápido. Y es cuando comienzo ha analizar lo que me dijo.

Escupo la crema de dientes en el lavamanos.

-QUE!!?- le digo alterada.

-Ve a arreglarte rápido mientras yo lo distraigo.

-¿Está en la sala?

-Si, ve rápido a arreglarte-me dice antes de desaparecer.

Me miró al espejo y me veo horrible, dígame el cabello y las ojeras.

-Ok..., Aurora no te alteres-me digo a mi misma.

Corro rápido a mi cuarto agarro la toalla y me meto a darme la ducha más rápida de mi vida.

Salgo, abro el armario y me coloco el primer top de mangas que consigo, un pantalón negro y mis zapatos deportivos grises .

Me miró un momento al espejo y no estoy mal para el baño pobre que me dí.

Me peino un poco el cabello y por último tomo mi cartera con mi cámara y el teléfono. Salgo de la habitación y sin mirar a la sala entro rápido a la cocina por una manzana.

Cuando la comienzo a comer lo más rápido que puedo entra Alba a la cocina.

-Pero que desastre de hermana tengo- Me mira con cara de desaprobación.

-Tengo hambre, ok?

-Jacob me acaba de decir que te va a llevar a desayunar.

-Oh-Me limpio la boca tragándome el pedazo que había mordido-Toma-le colocó la manzana a medio comer en la mano.

Salgo de la cocina para encontrarme a Jacob viendo una foto de mi familia que está en la estantería de la sala. Al parecer siente mi mirada y se voltea, me mira de arriba a bajo y vuelve a subir la mirada para darme una sonrisa torcida.

-Por fin la Bella durmiente me hace honor de su presencia.

-Disculpa, es que solo fueron cuatro horas de sueño y eso para mí es muy poquito-Le digo acercándome y detallando que trae unos jeans negros y una camiseta negra como con un logo grande de varios colores abstractos-¿Y tú cómo puedes levantarte tan temprano si supongo que te acostaste como a la misma hora que yo?

-Es la costumbre de salir a una fiesta y al siguiente día tener clases.

Le voy a hablar y es cuándo Alba sale de la cocina.

-¿Siguen aquí?, Se les van a pasar las horas rápido y no podrán ir a todo lo que van a ir-Dice una autoritaria Alba.

-¿Por cierto a qué lugares iremos?-Le pregunto a Jacob.

-Primero a la cafetería de la otra cuadra a desayunar.

-¿Y después?

-Es sorpresa-me dice sonriendo.

-No me gustan las sorpresas-me cruzó de brazos.

-Pues tendrás que aguantar está-Me responde Alba, acercándose a nosotros- Vayan llendose jovencitos- Y nos comienza a empujar a ambos hacia la puerta del apartamento.

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