•『 ✶ ¿Solo un gusto culposo? ✶ 』•

𖥻◝ O6 ✦

Minho durmió muy poco.

Se sentía tan ansioso al no saber nada de Jisung, además, la cena de ayer no fue la mejor, todo estuvo tenso y cada dos palabras había peleas.

Él se fue a la cama temprano, y empezó a enviarle mensajes a Jisung, pero ninguno fue respondido. Incluso por la mañana le envió mensajes, pero no había rastros del menor.

Termino por levantarse de la cama a las seis de la mañana, se baño y se preparó, para luego salir, sin ni siqueira despedirse de su novia.

Solo quería ver a Jisung y saber que él estaba bien.

Apesar de que de su casa al departamento de Jisung solo había una hora de diferencia, el viaje pareció eterno. El tiempo parecía pasar tan lento, y eso lo desesperaba, sentía que en cada segundo perdía algo.

Cuando por fin llegó, metió el auto al estacionamiento y salió de el rápidamente, sin asegurarse de que este bien cerrado.

En el departamento era concocido, ya que andaba muy seguido por allí, por ende, saludo a la mujer que se encontraba en la recepción, y le pregunto si Jisung se encontraba, cuando ella se lo confirmó, se despidió y fue directo al ascensor.

No daba más de la ansiedad, necesitaba verlo y saber que estaba bien.

Su teléfono sonó y lo sacó de su bolsillo apresurado, pensando que era Jisung, pero la decepción fue grande al ver que era su novia. De todos modos, la puerta del ascensor se abrió, y rápidamente salió, cochando con las personas que estaban por subir.

Una vez llegó al departamento de Jisung, golpeó la puerta con desespero, y como nadie abría sintió aún más ansiedad.

Sacó su teléfono y empezó a marcar el número de Jisung, sin embargo, no obtenía respuestas, hasta que por fin, la puerta fue abierta.

Minho solo lo abrazó, tomando por sorpresa a Jisung.

——Te extrañe, dragi —— susurró el mayor——. Me tenías preocupado.

——¿Preocupado?

——No me respondes los mensajes ——dijo separándose ——. Pensé que algo malo te paso.

Jisung le sonrió, sintiendo una calidez en su interior. Minho lograba ablandarlo con tanta facilidad, lo tenía a su merced y eso era peligroso, y muy doloroso.

——¿Vas a pasar o ya tienes que irte? ——cuestionó.

——¿Puedo pasar?

——Si vas a pasar, y después vas a irte corriendo cuando te llamé tu novia; no.

Minho agarró su teléfono y lo apagó, para luego mostrarselo a Jisung.

El menor le sonrió, abriendo la puerta completamente para que el rubio entre.

——¿Por qué no me respondiste? ——cuestionó Minho.

——Te dije que tenía un trabajo que hacer.  

——¿No podías enviarme un mensaje y avisarme?

Jisung cerró la puerta, y caminó hacía el pequeño sector de cocina, siendo seguido por el mayor.

——¿Quieres tomar algo?

——¿Por qué evades la pregunta?

——Tú mismo has dicho que no tenemos ningún tipo de relación, ¿por qué debo darte explicaciones?

Minho se cuestionaba lo mismo, él tampoco entendía porque necesitaba mantenerse al tanto de Jisung, porque quería estar con él, ya no entendía nada de lo que sentía. Jisung estaba comiendole la cabeza, cada minuto que pasaba con él lo volvía más adicto.

——¿Vas a querer tomar algo, o no?

——Me importas ——confesó, sorprendiendo al menor ——. Me importa lo que te pasa, y me preocupe, no quiero que me des explicaciones, solo te pido que la próxima me avises.

——Esperaste un día entero para venir, ¿estando preocupado? Podría morir tranquilo contigo.

——¡Nada te sienta bien, dragi! ——reclamó Minho, abrazandolo por detrás.

——¿Vas a querer algo para tomar, o no?

——¿Me das besitos? ——pidió, haciendo que Jisung volte para quedar de frente ——. Por favor.

Jisung era débil, Minho lo volvía débil, era tan dócil. No podía hacer nada contra eso, así que nuevamente cayó ante sus pies.

Jisung lo besó, dejándose atrapar por esa selva peligrosa en la cuál lo metía Minho. Dejando su corazón al aire, esperando que Minho pueda atraparlo antes de que caí y se parta.

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Minho pasó la noche con él, y en la mañana fue el primero en levantarse.

Le preparó el desayuno, e incluso desayuno con él. Pero cuando prendió su teléfono, ambos tuvieron que salir de inmediato del departamento, al recibir la noticia de que el padre de Lee estaba esperándolo.

Ahora el mayor se encontraba caminando con rapidez por los pasillos de la enorme empresa, con dirección a su oficina, ya que su padre estaba ahí.

Jisung lo seguía de atrás, esperando que está visita inesperada no traiga malas notícias.

——Entraré solo ——le indicó Minho, antes de que llegarán a la oficina——. No tienes que esperarme.

——Está bien, me mantendré cerca por si necesitan algo.

Minho soltó un suspiro, y frenó frente a la puerta de su oficina, sin dudarlo entró, aunque en el fondo tenía bastante miedo.

——¿Por qué no estabas ahí? ——preguntó su padre con cierto enojo.

——Estaba ocupado.

——¿Acostandote con tu secretario?

Minho lo miró confundido, como haciéndose el desentendido.

——No soy idiota. Y tú eres muy malo para fingir. Tienes una novia, y una imágen que mantener, ¿vas a echar a perder todo por un chico?

Minho solo agachó la cabeza, sin tener el valor para decir algo.

——Me decepcionas, hijo. Creí que contigo hice las cosas bien, pero parece que no.

——Él no significa nada para mí ——mintió, porque no podía soportar los reclamos de su padre——. Solo la pasamos bien y ya.

——Como digas ——dijo, levantándose ——. No me decepciones, Minho. Puse mucha confianza en ti, cuidado con lo que haces ——advierto, saliendo de la oficina.

Jisung quién se encontraba afuera, tuvo que poner la mejor sonrisa, y fingir que no había escuchado nada, y que para nada esos comentarios le afectaron.

Minho salió segundos después, diciéndole que podía volver a su casa, que ya no lo necesitaba ahí.

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