Fue sorprendente la facilidad con la que su padre aceptó su la noticia, en cierto punto, le daba un poco de miedo, y aunque pensaba que eso traería consecuencias a futuro, no le importaba.
Nada se comparaba con aquella sensación de felicidad que sentía con Jisung, nada podía hacerlo sentir igual de bien que él. No le importaba si debía alejarse de su padre, si su empresa se iba a la ruina, ahora, lo importante era él y su bienestar.
Jisung se habia puesto muy feliz con la noticia, sus ojos llorosos demostraban lo emocionado que estaba, y esa sonrisa tan brillante que tenía, le hicieron comprender a Minho, que no importaba sí el mundo se caía, mientras, Jisung esté bien, él iba a estar bien.
Él sabía que lo lastimó y que fue cruel con Jisung, entendía que hizo las cosas mal desde un principio, siempre llevaba en su cabeza aquella mirada desilucionada que le daba Jisung cuando debía irse, comprendía a la perfección que Jisung no la paso bien estando con él, pero, quería cambiar eso.
Deseaba hacerlo feliz, llenarlo de alegrías y no volver a lastimarlo, ahora, quería cuidarlo y hacerle saber lo importante que era para él.
Jisung se encontraba jugando con su hermanita, él la amacaba, y ella sonría ampliamente cuando el columpio se iba hacía adelante.
Minho no podía evitar sonreír ante la vista. Le hacía bien verlo feliz, le hacía feliz verlo tan libre.
Pero, lo que más alegría le causaba, era que él pertenecía a esa felicidad.
——¡Nini! ——gritó Sowon, corriendo hacía Minho, siendo perseguida por su hermano.
El mayor se levantó de su asiento, recibiendo con los brazos abiertos a la pequeña.
——¿Qué pasa, Soo?
——Soo, no, no preguntes ——pidió Jisung, un poco agitado, ya que, había corrido a su hermana hasta donde estaba Minho.
——¿Qué es lo que no quieres que me diga? ¿Qué escondes, Jisung?
——Nini, tú y...
——Soo, te dije que no.
——¿Por qué no la dejas hablar? ——cuestionó Minho.
——Porque eso a ella no debe importarle.
——¡Yo te conté cuando me gustaba un compañero! ——exclamó ella enfada——. Tú no quieres contarme nada, nada, yo quiero saber, ¿por qué no puedo saber?
——¿Qué es lo que quieres saber, Soo?
——¡Minho!
——Jisung, solo va a preguntar algo, está bien.
——Iré a comprar agua. ——Ya rendido, se fue a buscar un kiosco cercano, dejando a su hermana con Minho.
——Ahora sí, ¿qué querías preguntar? ——Minho agarró la mano de la pequeña, y comenzó a caminar hacía el bando, en donde se encontraba sentando antes.
——Yo quería preguntar sobre tú y Jisung, porque, ustedes están más cercanos... Y en el colegio, leímos una historia de amor, de una princesa y príncipe, y yo quiero saber eso, sí son amores...
——¿Amores?
——Personas que se aman, ¿no sé dice así?
¿Minho lo amaba? ¿Él podría decir que amaba a Jisung? No sabía, pero, sentía amor, cuando lo veía, cuando estaba con él, el amor estaba ahí, y por ese amor, se sentía vivo.
Quizás, todavía era muy pronto para hablar de personas que se aman, no obstante, iban direccionados hacía esa ruta.
——Nos queremos mucho. Yo siento amor, pero, todavía, no sé, es complicado, Soo.
——Bueno, entonces, ¿todavía no estás listo para decirle a Jisung que lo amas?
——Siento amor por él, pero, siento que es otra cosa diferente el amarse. Todavía nos estamos conociendo, y vamos de a poco.
——Pero, ¿tú lo quieres mucho o poco?
——Mucho. Lo quiero mucho.
——Jisung también te quiere mucho. Ustedes son queredores entonces, ¿no?
Minho con una sonrisa asintió.
——A Jisung le gusta el helado, de cualquier gusto. Y cuando está triste, le gusta que lo abracen, también, le gusta que lo cuiden, porque él muchas veces se descuida.
——¿Por qué me dices eso, Soo? ——cuestionó el mayor. Esos eran pequeños detalles (que sorpresivamente) él ya sabía de Jisung.
Él sabía que a Jisung le encantaba que lo abrace por atrás, que le den besos en el cuello. A Jisung le encanta ser mimado y consentido con pequeños detalles, como una carta, una salida o un pote de helado...
——Porque es importante que lo sepas.
Sin más que decir, la niña se paró y fue corriendo hacía los juegos.
Una vez, Jisung vio que su hermana se marchó, fue a sentarse en el banco junto al mayor, apoyando su cabeza en el hombro de Minho.
——¿Qué te dijo?
——Me pidió que te cuide.
——No te dijo eso.
——¿Escuchaste la conversación, dragi chismoso?
——No...
——Entonces no sabes de lo que hablamos.
Jisung rodó los ojos.
——¿Quieres agua?
——Quiero un besito.
——Hay niños.
Sin importarle nada, Minho lo besó, y agarró los cachetes del menor, cuando quiso separarse.
——No estamos haciendo nada ilegal ——le recordó.
——¡Son como la princesa y el príncipe del cuento! ¡Ellos también se besaron! ——exclamó Sowon, acercándose nuevamente a ellos.
——La diferencia es que nosotros somos dos príncipes .
El monstruo es más grande, cuando vos más lo dejas creecer, y Minho lo entendió cuando enfrento a su padre.
Minho entendió que no estaba viviendo, y ya no quería volver ahí.
Ahora era feliz y tenía a un precioso chico que lo hacía sentir muy bien.
No es de lo mejor, pero, NO PUEDO ESCRIBIR, tipo no sé me re costó terminar este capítulo, en fin, les quiero mucho y gracias por apoyar la historia. ♡
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•『 ✶ ¿Solo un gusto culposo? ✶ 』•
Random𖥔 ࣪ ᥫ᭡. ᗰIᑎՏᑌᑎᘜ 🌆❜ ╭─▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬─╮ ✹ 𖣯 Minho tenía una vida soñada, lo que cualquier hombre quería quisiera tener. Pero tenía un gusto extraño hacía su asistente. ✹ 𖣯 ╰─▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬▭▬─╯ ═══⚀. Segunda saga del closet...