4 | dinner

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Fin de semana. El día tan esperado por todos los trabajadores había llegado, el ansiado viernes.

Había sido una semana bastante complicada, todos tuvieron que reorganizarse debido a la presencia de un nuevo miembro; Luke.

Él había estado al tanto de la situación y siempre estuvo ahí para apoyar, Juliette se dio cuenta de que no había cambiado mucho desde secundaria, seguía siendo un chico bastante atento. Durante el trabajo sus conversaciones eran nulas y cuando tenían que intercambiar palabras era solamente para cosas del trabajo.

Ambos habían marcado un límite y eso les estaba funcionando bastante bien, aparentemente. Hubo más de dos ocasiones en los que ambos se vieron en situaciones vergonzosas y se vieron en la necesidad de disculparse.

Tal y cómo la vez en la que Luke atrapó a Juliette verlo mientras tomaban un café con los demás por la mañana o también la vez en la que iban tarde al trabajo y cuando entraron al ascensor Luke cayó sobre ella.

Sus rostros habían quedado a una distancia muy corta, eso hizo que sus nervios estuvieran al mil, Luke hablaba de una manera tan apresurada que apenas fue comprensible y Juliette tenía el rostro completamente rojo. Esa mañana apenas y pudieron verse al rostro después de lo ocurrido.

La mayoría ya se había ido a casa, incluso el director lo había hecho, menos ellos dos, estaban haciendo trabajo extra. Ese día apenas se habían dicho unas pocas palabras, aun existía incomodidad por lo que había ocurrido en el ascensor a pesar de que sucedió hace cuatro días.

—¿Te quedrás más tiempo aquí? —preguntó Luke llamando la atención de la pelinegra.

Ella dejó de ver la pantalla de la computadora y dirigió su vista al rubio que estaba de pie a unos metros de ella, ambos se habían encontrado en la sala de descanso.

—Probablemente, ¿tú ya te irás?

—Sí.

—De acuerdo, qué te vaya bien —sonrió.

—De hecho —comenzó—. Iré a cenar y me preguntaba si te gustaría ir conmigo

Juliette parpadeó un par de veces sin saber que responder, ir a cenar con Luke parecía ser más complicado de lo que se escuchaba, pues estarían sentados en la misma mesa, uno frente a el otro durante una hora aproximadamente y en algún momento de la noche tendrían que hablar.

—¿Estás invitándome a cenar? —enarcó una ceja.

—Sí, eso fue lo que hice —sonrió—. Es muy tarde y estoy seguro de que debes tener hambre.

—Pues no estás muy equivocado Luke Hemmings.

—¿Eso fue un sí?

—Sí —apagó su laptop y la dejó a un lado—. Vamos a cenar.

Luke asintió dándole una sonrisa a Juliette, ella ordeno todas su cosas para así guardarlas en su bolso, el rubio la espero con paciencia y desde donde se encontraba observó todo lo que ella hizo.

Juliette se acercó a él, haciéndole saber que ya estaba lista y que ya podían irse, la chica fue quien llamó el ascensor y ella fue la primera en entrar para marcar la planta baja que era a donde se dirigían.

—¿Trajiste auto? —preguntó el rubio una vez las puertas del elevador se habían cerrado.

—No tengo auto —respondió ella viéndolo sobre su hombro—. Soy pésima manejando.

—¿Te irías en taxi?

—Pediría un Uber —se encogió de hombros—. Mi papá ha dicho que debería de aprender a manejar, pero simplemente eso no es para mí.

𝑺𝒂𝒕𝒆𝒍𝒍𝒊𝒕𝒆 | luke hemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora