Miro hacia abajo cuanto siento el frío en mis piernas.
-No sabía que la entrada a este mundo incluía un cambio de ropa -Miro a Jimin que parece tan sorprendido como yo-
Ahora estoy usando un vestido negro hasta las rodillas, mi cabello cae suelto en ondas a los lados y un collar de dije rodea mi cuello.
-En mi defensa yo tampoco lo sabía, pero te ves bien, es decir ¿Está bien, no? -Asiento con una pequeña sonrisa-
-Solo déjame... -Murmuro agachándome mientras me quito los tacones, suspiro aliviada- Así está mucho mejor -Jimin sonríe y asiente en acuerdo-
-Tenemos mucho que caminar.
Esto es bastante parecido a una cueva, hemos caminado solo unos pocos minutos pero mirando hacia adelante solo veo el camino rocoso y las antorchas iluminando el camino.
-Tal vez debería haberte avisado que no soy muy buena en caminatas, así que solo voy a preguntar una vez ¿Falta mucho? -Jimin sonríe y no estoy segura de si es por su respuesta-
-No mucho, pero en realidad podría ser mucho más rápido para mi -Me mira ladeando la cabeza- Aunque no estoy seguro de que lo sea para ti.
Frunzo el ceño, por supuesto no estoy entendiendo nada.
-Supongo que has escuchado a las personas hablar con las típicas palabras "Que ardas en el infierno" o cosas referentes a las llamas del infierno -Asiento, era el castigo que muchos esperaban que las personas malvadas tuvieran-
-Supongo que vas a explicarme el trasfondo y revelarme que en realidad nada es como los humanos creemos -El agita la cabeza dándome la razón- Entonces, adelante.
-Bueno si te has dado cuenta no hay mucho calor aquí abajo pero si hay fuego, más sin embargo las verdaderas "Llamas" somos los demonios -Me quedo observándolo porque esa explicación no me alcanza para descifrar lo que quiere decir- No solo podemos controlar el fuego.
Jimin extiende la mano en dirección a una de las antorchas el fuego de esta crece hasta que toca el techo rocoso tornándolo de negro, a medida que su mano vuelve a su lugar el nivel del fuego también vuelve a ser como el del resto de antorchas en el lugar.
-Nosotros en si somos fuego.
Ahora su mano toca directamente el fuego de la antorcha más cercana y en ese momento desaparece. Me quedo sin habla mirando la antorcha que de alguna manera lo consumió. Escucho el arder de las brasas en la siguiente antorcha y veo las llamas aumentadas, pasa a la siguiente y a la siguiente hasta que Jimin se materializa de nuevo frente a mi.
-Podría moverme directamente a la fuente de fuego más cercana a donde nos dirigimos pero no estoy seguro de que sea tan fácil para ti -Termina su explicación frente a mi y yo solo puedo mirarlo como si no fuera real-
Si, yo creo que en lugar de no ser fácil no es posible en absoluto, tu puedes controlar el fuego y yo aún no estoy afiliada a este lugar como rigente así que mejor sigamos caminando -Retomo mis pasos y el rápidamente me acompaña-
-Yo creo que puedes hacerlo aún sin ser rigente -Lo miro de reojo- No quería mencionarlo pero lo que sucedió cuando eras niña me hace sospecharlo.
Si era sincera yo también había pensado en ello, pero a diferencia de el no había querido nombrarlo en absoluto.
-¿Entonces que significaría la frase "Arder en el infierno"? -Jimin se toma un momento para reaccionar, notando que no quiero hablar de ello para nada, se encoge de hombros-
-No estoy seguro de lo que los humanos esperarían, pero supongo que significaría que nosotros los demonios nos encargamos de atormentar por el resto de la existencia las almas de lo que suelen llamar pecadores.
-Me parece una buena explicación, pero ahora que ambos acordamos que no puedo teletransportarme por medio del fuego al igual que yo creo que deberíamos seguir caminando -Jimin asiente y empieza a caminar de nuevo conmigo a su lado-
Caminamos durante un par de minutos en silencio, yo no sentía la necesidad de examinar el camino porque hacía unos metros atrás que me había dado cuenta que todo era exactamente igual, las antorchas parecían estar a la misma distancia una de la otra por el resto del camino y no había ningún objeto que resultara relevante.
-Tengo otra pregunta -Dije cuando mi mente idea una duda, Jimin asintió para que hablara- Se supone que Lucifer es un ángel caído ¿No?
Pregunte porque después de todo podía resultar que todas las creencias en el mundo fueran un mito y la realidad fuera completamente distinta e inesperada.
-Lo es, las personas acertaron bastante bien en esa parte de la historia ¿Es esa tu pregunta? -Sacudo la cabeza, solo era el inicio de ella-
-Pensaría que los ángeles son eternos y hasta donde sé todos los seres que mencionaste en tu explicación son inmortales así que ¿Por qué necesitarían un sucesor? ¿Y cómo es posible que yo sea una?
-Bueno en realidad es una duda con mucha lógica, espero ser lo suficientemente bueno explicando como para resolverla, entonces... -Sus ojos vagaron por el camino antes de fijarlos en un punto y empezar a hablar- Eres bastante consciente de que los humanos son seres en evolución, siempre están evolucionando creando, cambiando sus ideas, descubriendo nuevas cosas y así mejorándose o por otra parte empeorándose a si mismos.
Asiento, en mi opinión aunque el mundo había avanzado mucho y habían ideas como el feminismo que me parecían acertadas sentía que nos habíamos atrasado mucho en otras cosas como en las relaciones humanas, no creía que a través de una pantalla fuera la mejor forma para conocer a una persona pero así era como se realizaban muchas de las socializaciones de hoy en día.
-Para los seres inmortales es difícil evolucionar porque solo conocemos un mundo, la tecnología, los descubrimientos científicos y todo lo demás es irrelevante para nosotros que hemos pasado siglos en esta tierra, pero como el libro lo dicta el mundo debe tener gobernantes acordes a su tiempo así que incluso después de ti habrá alguien más de acuerdo al mundo de ese entonces.
Asiento, en realidad eso tiene mucho sentido, solo que tal vez podría durar nueve siglos como gobernante y eso podría ser poco para un ser inmortal.
-Y sobre ti ya sabes, es por tu descendencia pero supongo que también debes tener una fuerte conexión con el universo que ni siquiera yo soy capaz de igualar -Lo miro ladeando la cabeza-
-Bien, se supone que fui elegida por ser descendiente de Lilith, pero entonces ¿Tu por qué fuiste elegido?
-Bueno podría decirse que tiene que ver con mi nacimiento, para ustedes los eventos astronómicos son cosas para disfrutar visualmente, para nosotros son fechas un poco más especiales, algunos de estos eventos nos inhiben, otros nos refuerzan y en otros se dan nacimientos de seres como yo.
Lo miro interesada, esa suena como una buena historia para contar y de hecho me hubiera gustado escucharla antes.
-Los ángeles nacen de las lagrimas de alegría que lo creas o no son menos comunes de lo que crees, los vampiros son más una creación mágica que no comprendo del todo y los demonios aparecemos según la voluntad de nuestro regente.
-Pero tu eres diferente -Dije comprendiéndolo y el asintió-
-Yo nací de una la última estrella fugaz de una lluvia de estrellas -Suspira con una sonrisa- Lo que suena bastante cursi pero según lucifer eso explicaría bastante bien porque soy una persona con tanta luz propia.
-Supongo que Lucifer tiene razón, la luz propia que emites es lo que me hizo confiar en ti, de otra manera no habría aceptado tan fácilmente -Jimin se encoge de hombros-
-O simplemente estamos destinados y que te negaras no era una opción -Me sonríe- Me gusta más creer eso.
Se adelanta a mi y me toma un segundo alcanzarlo sin poder creer que un demonio acaba de coquetearme. Pero no suena tan descabellado, tal vez estamos destinados, tal vez es de esta forma como las cosas debían ser.
ESTÁS LEYENDO
La leyenda del sol |Maknae line|
FanfictionUn ángel, un vampiro y un demonio tendrán que cargar con la responsabilidad para que sus reinos subsistan a la nueva era, encontrar a sus próximos gobernantes y cumplir la leyenda. Jisu gobernante de los vampiros, Nara gobernante del infierno y desc...