2. 2 Coraje

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La cabeza y el corazón de Junmyeon estaban destrozados por los últimos acontecimientos.

Había dicho tantas palabras crueles, pero en realidad no había mentido en la mayoría. Él de verdad sentía que no podía volver. No se lo merecía.

A pesar de que había pasado tanto tiempo, aún le atormentaban los años que había vivido en aquella secta, las pesadillas que tenía a penas cerraba sus ojos eran un recordatorio del daño que causó su padre.

Se encontraba en la que ya había reconocido como su habitación cuando escuchó a Arseni entrar, el día de ayer había sido caótico también para él, perdió a varios de sus hombres y aún le tocaba el orgullo saber que Sehun había descubierto su paradero. Ni siquiera el KGB tenía ese tipo de información, si fuera así, ya estarían muertos probablemente.

—Estuvo muy bueno el teatro que armó tu novio ayer, es valiente, lo reconozco.

Junmyeon vio a Arseni sentarse en el lujoso sillón frente a su cama, llevaba un traje negro y unos relucientes zapatos que seguramente costaban millones. No se acostumbraría a ver tanto dinero plasmado en pequeñas cosas.

—Ya no somos nada.

Después de todo lo que salió de su boca ayer, ya no le temblaba decir cualquier cosa. Ya no le daba miedo nada, al fin y al cabo, había llevado a cabo a su más grande temor, herir a las personas que le habían salvado.

—Estaba seguro de que ibas a correr a sus brazos, eso hubiera complicado un poco la situación en la que te encuentras, probablemente Sehun hubiera estado siendo enterrado debajo de esta mansión ahora mismo —Arseni se rió como si hubiera dicho la mejor broma, sin embargo, Junmyeon tembló de tan solo imaginarlo —Bueno, moya lyubovʹ, no es para que te pongas así, cada vez te vuelves más aburrido.

—Quiero entrar en tu organización —Dijo firmemente cambiando de tema por completo.

Esta vez era el turno de Arseni de quedarse en silencio. No duró tanto ya que su estruendosa risa volvió a escucharse mientras sacaba un puro y lo encendía.

—¿Crees que entrar en una mafia es así de fácil?... retiro lo que dije hace unos segundos, no eres aburrido, eres divertido en ocasiones.

—¿Qué planeas hacer conmigo entonces? No voy a estar aquí encerrado para siempre.

Vio a Arseni dar una calada a su puro antes de hablar.

—No es una mala idea, tenerte aquí como un bello cuadro al que admirar, es lindo.

—Arseni...

—Sabes, moya lyubovʹ, a pesar de que tuviste un novio mafioso, creo que no estás enterado de cómo va este mundo. Nosotros no vamos rescatando a jóvenes lindos de los loqueros.

—Estuve en una secta ¿y piensas que no sé sobre muerte y torturas?

Arseni no mostraba ninguna emoción en su rostro así que Junmyeon no tenía idea de lo que pasaba por su cabeza.

—Moya lyubovʹ, mi organización no es como cualquier otra, no se acerca ni un poco a la de Oh Sehun, ellos son poderosos, sí —Arseni caminó hasta sentarse en la cama frente a Junmyeon, le miraba tan fijamente sin olvidarse de su puro en su boca—, pero nosotros aún más.

Había algo en la mirada de Arseni que el coraje de hace unos segundos, había escapado, ahora sentía una frialdad inexplicable, ni siquiera se acercaba a la mirada que le echaba su padre cuando debía castigarlo, era algo más, algo intenso escondido tras esas pequeñas pupilas.

—Nuestra historia, nuestras vivencias y nuestro negocio no empezó como la de los sicilianos o la triada, nosotros éramos los "Vory v Zakone", fuimos tratados como perros, Lenín y Stalin nos humillaron, nos encerraron y nos pisotearon de todas las asquerosas formas que puedes imaginar —Arseni sonrió, sus ojos volviéndose más distantes pero ahora sin ocultar el odio que sentía—, gracias a ellos nos matamos entre nosotros, ¿sabes? La peor masacre que pudo haber existido en nuestra organización, incluso practicaron canibalismo y para ellos no éramos más que bestias que recibían lo que se merecían, "Que se maten entre ellos", eso fue lo que decían esos cerdos después de haberles ayudado en la Segunda Guerra Mundial. Mi padre y sus hermanos no fueron más que una carnada, animales enviados a morir y si sobrevivían, regresaban al mismísimo infierno de los gulags.

Checkmate [SeHo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora