Checkmate [SeHo]

4. ¿Temor?

Sehun levantó la vista de su teléfono móvil cuando escuchó que alguien se aclaró la garganta para llamar su atención, en la puerta, Junmyeon le miraba tímido y parecía que quería decir algo pero las oraciones no se formulaban bien en su cabeza.

—Yo... ¿Dónde voy a dormir? —Preguntó al fin y Sehun parecía que recién acababa de darse cuenta que en ese pequeño lugar no iba a entrar nada más, ni siquiera la pequeña e indecente cama de su compañero.

—Mierda, no tengo idea.

Junmyeon se quejó mentalmente, no pensaba ponerse a discutir con el hombre que invadió su espacio, simplemente iba a bajar y a pedirle a su padre alguna habitación vacía, estaba cansado y lo que más deseaba en ese momento era dormir, al fin y al cabo eran las once de la noche y se supone que él ya debería haberse metido a la cama hace dos horas.

Se dio la vuelta con el claro propósito de salir de la habitación pero Sehun habló.

—¿A dónde vas? —Su voz sonaba más distante de lo normal y Junmyeon le miró.

—A pedirle al Cardenal otro lugar para dormir.

La respuesta de Junmyeon no pareció complacer a Sehun porque frunció el ceño y negó con la cabeza.

—Tú jodidamente no me vas a dejar solo en este lugar tan tétrico.

Junmyeon quiso reírse al ver el pánico en los ojos del hombre pero se mantuvo serio.

—No puedo dormir aquí, mi cama no entra.

Sehun simplemente se encogió de hombros y señaló con su dedo el largo sofá que se encontraba cerca de la puerta.

—Duerme ahí o la única forma de que salgas de esta habitación será con un tiro en la cabeza.

Junmyeon frunció los labios pero no se quejó, no tenía ganas de pelear, el cansancio le estaba matando y para ser sincero, ese sofá se veía más cómodo que su cama así que simplemente obedeció. Cuando estuvo a punto de caer en un sueño profundo, la voz de Sehun le despertó.

—Oye... ¿Estás despierto? —Junmyeon planeaba ignorarle así que no dijo nada y se tapó la cara con su pequeña manta, el sofá no era tan molesta, quizá un poco estrecho pero él no sabía moverse mucho así que estaba cómodo— Maldita sea, despierta, yo... No puedo dormir.

Junmyeon gruñó molesto, de verdad estaba agotado, ¿Ese chico no podía callarse la boca?

—Solo duerme.

—No puedo, no después de esa jodida historia que contaste, así que despierta.

Junmyeon se rió quedito, a su cabeza vino un recuerdo de su infancia que le llenó de calidez pero inmediatamente se esfumó sin dejar rastro. Decidió ignorarlo y se sentó en el sofá, un poco de luz entraba por la ventana y podía ver la figura de Sehun envuelta en sus mantas, el chico estaba tapado hasta la nariz y se encogía como si quisiera hacerse pequeño.

—¿Me estás diciendo que un jefe de la mafia le tiene miedo a fantasmas?

Su intención no era burlarse, solamente le parecía extraño algo así.

—Solo cállate y no te duermas hasta que yo me quede dormido ¿Entendiste?

Junmyeon no se detuvo a pensar en lo estúpido que era eso así que solo asintió y se quedó mirándolo hasta que notó la respiración de Sehun volverse más lenta indicándole que ya se había quedado dormido. Se levantó y se acercó al hombre para poder asegurarse que estuviera durmiendo, no pudo evitar quitar un mechón de su cabello que caía en su mejilla molestándole.