5. Recuerdos bloqueados

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Junmyeon se contradecía mucho, estaba perdido, por un lado quería creer lo que su padre le había enseñado toda su vida, pero otra parte de él tiraba más fuerte hacia ser racional, ¿Qué tenía de malo querer a un chico? Realmente nada, pero buscando en su memoria, más de una vez le pareció incorrecta la actitud de su mejor amigo. Claro estaba que nunca iba a darle la espalda, pero debía aceptarlo. Ahora, no solo debía aceptarle a él, sino también a estos sentimientos que estaban floreciendo en su interior.

Estaba mal.

No solo estaba mal por el hecho de que Sehun fuera chico, sino también que era mafioso, alguien que ha asesinado en su vida varias veces, que ha hecho cosas ilegales y con ello, quizá no tenga el perdón De Dios.

Estaba mal.

Estaba fatal también pensar en que era guapo, ya no solo físicamente porque su buena apariencia era innegable, sino que era lindo con su actitud amistosa con sus amigos, con su mafia, había visto el aprecio que el hombre tenía hacia Chanyeol y cómo este también desprendía un aura cariñosa con él.

Estaba mal.

Junmyeon sabía que estaba incorrecto sentirse triste porque en estos últimos cuatro días que pasaron desde que su primer beso fue robado, Sehun no había vuelto a hablar sobre lo ocurrido, es más, el hombre había hecho como si nunca hubiera pasado ese pequeño encuentro inesperado de sus labios.

Luego de la clase de Teología que tenía las primeras horas, Junmyeon salió directo a la capilla para poder encontrar respuestas, se iba a saltar el almuerzo pero poco le importaba, su mente y su corazón no paraban de molestarle y necesitaba que alguien le guiara o se iba a volver loco.

Cuando entró se encontró con el Padre Lee quien le sonrió y fue a sentarse a su lado. Quizá el Padre Lee no era alguien con quien debería hablar sobre ese tema pero Junmyeon sabía que no iba a ser juzgado por este hombre y que quizá hasta podría ayudarlo.

Le contó todo sobre Sehun, desde la mala actitud que había tenido con él hasta el beso que había recibido de su parte.

—¿Qué es lo que te molesta exactamente? —Preguntó el Padre Lee con su voz serena.

—La homosexualidad no está aceptada po-

—No —De inmediato fue interrumpido y miró al Padre con sorpresa, el hombre pocas veces cortaba a alguien cuando hablaba— Mi pregunta es clara Junmyeon y quiero que me respondas con sinceridad, ¿Qué te hace sentir tan mortificado?

Junmyeon se quedó en silencio por varios segundos tratando de encontrar las palabras correctas que quería decir y su corazón empezó a doler.

—Que no me hubiera causado repulsión... que no me hubiera desagradado haber sido besado por alguien cruel como Sehun.

Y ese era su temor, quizá el hombre nunca le había lastimado a él, pero sí le había hecho daño a muchas personas, la droga que traficaba seguramente llegaba hasta niños, las armas que vendía iban para criminales, la extorsión que quizá ejecutó con algunas personas inocentes. Sehun era cruel, era un jefe de una mafia y Junmyeon solo se había sentido cálido al sentir sus labios.

Estaba mal.

—Hijo, es entendible que te sientas de esa forma, pero ten en cuenta tus sentimientos, querer a alguien nunca está mal, es un sentimiento que recién estás descubriendo y que no debes prohibirle salir porque solo te vas a hacer daño tú mismo. Nunca te prives de sentir amor, conoce a Sehun, date cuenta tú mismo de quién es en realidad porque dudo que una persona tan amable y buena como tú siquiera se haya fijado en alguien tan cruel como describes que es Sehun.

Checkmate [SeHo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora