Hace cuatro años...
Su madre le sonrió de oreja a oreja.
"Ay, estoy en verdad muy feliz por ti, hija mía." Habló contenta, acariciando su antebrazo de forma dulce. "Siempre quise esto. Lo sabes, ¿verdad?"
"¿Querer qué, mamá?" Dijo en un ceño fruncido, tanteando los pliegues de su elegante vestido, algo anonadada de lo suave que se sentía la tela bajo su pálida piel.
"Sí, exacto, que te cases." Siguió sonriendo, esta vez mirándola fijo a los ojos. "Hey, Bora, escúchame bien, Seung es un buen muchacho, es el indicado, excelente, ¿okey? Tengo la corazonada de que él será el esposo perfecto..." Susurró, sobándole la espalda. "Así que quita esa bendita carita de desagrado. Hoy es un día especial. Agradece. Ponte alegre..." Lento, subió la mano hasta su castaño cabello, lugar donde acomodó los mechones sueltos. "Hazlo por nosotros, tus preciados papás, ¿de acuerdo?"
"Sí, madre, eh... Iré por agua. Enseguida regreso. Espérame aquí."
Caminó a paso apresurado, fingiendo sentirse cómoda, cuando en realidad estaba muriendo por dentro. Saludó a su mamá en el proceso. La mujer no podía parar de sonreír. Ella realmente estaba feliz. Suspirando y con las pocas fuerzas que tenía, fue directo al lavatorio, abriendo la llave. Otra vez lanzó. Vomitó por cuarta vez. Sí. Se juró a sí misma no volver a vomitar, pero no pudo evitarlo, el líquido espeso y transparente cayó por su barbilla, ensuciándose de inmediato. Apoyó el cuerpo en la cerámica helada, tratando de recuperar el aliento, angustiada. ¿Acaso así lucía una novia? SuA apenas movía los dedos, con suerte y hablaba. Contraer matrimonio no parecía ser tan malo, su futuro marido no parecía ser tan malo... ¿Entonces? ¿Qué putas le pasaba? Al final, tomando el papel lamentable, se limpió las comisuras, mirándose decepcionada por última vez en el espejo, no sin antes retocarse de nuevo el maquillaje. Iba a hacerlo. Iba a casarse con ese hombre. Le daría el gusto a sus padres... ¿Qué puede pasar?
Minji, su adorable mejor amiga, apareció por detrás, sonriendo. Todo el mundo sonreía, menos la mismísima Kim Bora. Qué tontera. Por Dios.
"¡Oye! ¿Qué haces?" Exclamó, acercándose. "¿Mhm? Ya es hora, boba. Vamos. Yo te ayudo."
"Oh, no, no es necesario... Vamos."
El infierno comenzó.
[...]
Hace unos meses...
Bora solo se casó para complacer a sus padres.
"¡Idiota!" Le gritó enojado, cerrando de un portazo. "¡Dime! ¿Por qué mierda no atiendes el puto teléfono? ¡¿Qué te pasa, maldita sea!? ¡¿Me estás engañando, acaso!?"
Bora nunca engañó a nadie.
"Tenía el celular en silencio, Seung, yo..."
"¡¿Y qué con eso? ¡Contéstame cuando te hablo! ¡Dios! ¿Qué tanto haces que no puedes leer mis mensajes?"
Bora estaba cocinando.
"Oh, claro, cocinabas... ¿Sabes, Bora? No entiendo el por qué de tu esfuerzo... Si tu comida es horrible."
Bora parpadeó.
"Diablos, no... Me pasé. Perdóname."
Bora calló. Lloró en silencio hasta el baño.
"¡Bora, carajo, abre la maldita puerta! ¡Lo siento, ¿sí?! ¡Bora!"
Bora hizo oídos sordos. Escupió sangre. Vomitó todo el desayuno.
"Bora, por favor..."
Bora sollozó. Asustada y temblando.
"Bora, abre, por favor, amor..."
Bora se desmayó.
"Por favor..."
[...]
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The Gray Life [suayeon]
Fanfiction➤ SuA es una muchacha algo escandalosa. Siyeon una joven florista de veinte años.