Lettere

capítulo dos - Reencuentros

Mya

- ¡Primo! No sabía que estudiabas aquí - Val se acerco y envolvió en un abrazo a Ashton para luego voltearse en mi dirección - Mya él es nuestro primo Ashton. - dijo la castaña con una sonrisa - Ashton ella es Mya, una vieja amiga.

- Si Vale, ya nos conocemos - le dijo Ashton con una sonrisa inspeccionándome.

-oh, claro, estudian juntos lo olvidé, pero que bueno así nos ahorramos presentaciones.

- Hermanito, él es Marco, un nuevo amigo, y Marco él es mi hermanito Aarón.

Ambos se estrecharon las manos.

- ¿eres el nuevo del equipo verdad? Juegas bien.

- Gracias, tu igual.

- Se me dan mejor otras cosas.

Estábamos los cinco sentados en la mesa de la cafetería. Yo estaba entre Vale y Marco, con los primos frente nuestro.

Vale, Marco y Ashton parecían tener una conversación muy amena, pero yo no era capaz de decir siquiera una palabra.

Estaban muy entretenidos en su plática cuando Vale abrió los ojos recordando algo y se giró a su hermano.

- Aarón, si entraste al equipo? - le pregunto su hermana.

- Yo creo que le quite el puesto de capitán a nuestro querido primo - dijo con una pequeña sonrisa.

- No te pienses la gran cosa primito - le contesto Ashton siguiéndole el juego.

Ambos empezaron a molestarse y hacerse bromas el uno al otro, también incluyeron a Marco en su pequeño juego.

Vale al notar que no decía nada me hablo.

- linda, no te quedes callada, acaso te comió la lengua el gato? - dijo con una pequeña sonrisa.

En el poco tiempo que llevamos juntas me he dado cuenta de que Val tiene unas muy buenas vibras, y en las conversaciones que la he visto hacer, a menudo trata de incluir a todos.

Me agrada esta chica

Si a mí también

¿Te acabas de responder tú sola?

¿Me acabó de responder yo sola?

Pude sentir la mirada de ambos primos dirigirse a mí lo que me puso un poco incómoda.

- Eso sería un milagro -dijo Ashton- cuando éramos niños no cerraba el pico un momento.

-Cuando eran niños? - dijo Vale - son amigos desde niños? - nos pregunta sorprendida.

- De hecho, ya no -dije.

- oh ¿Por qué? - pregunto con suma curiosidad.

- Vale, no te entrometas en la vida de los demás -le dijo Aarón - por algo será.

- oh, si tienes razón, perdón chicos.