Mundos diferentes (RE 6) |Piers Nivans|

[09]

El viaje a Edonia

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Diciembre 22, 2012

Esa mañana recibimos la orden de viajar a Europa, mejor dicho, Edonia. El momento había llegado, debíamos prepararnos para la misión y eso implicaba hacer maletas para emprender un viaje de doce horas al continente europeo.

Sin embargo, habría tiempo de sobra para pasar un momento más todos reunidos, pues gracias a nuestro trabajo, nunca sabríamos si todos regresaríamos con vida. Y a mí por supuesto, además de mis amigos aquí, me preocupaba mi familia y mi otra realidad. Era el momento de disfrutar un último trago de cerveza, de pasar tiempo con amigos y familia...

—¿Irás al bar con nosotros? —le pregunté a Redfield terminando de hacer mi maleta, colocando la valija en el suelo.

—Esta vez no, Brooke —respondió observando su teléfono celular—. Iré a la central a ver la información que tienen para nosotros y saber a qué nos enfrentaremos. Así que recuerda que salimos en cinco horas, no dejes que los chicos se sobre pasen y lleguen a tiempo— me advirtió divertido.

—No te preocupes Chris, todo estará bajo control. Estaremos ahí puntuales— le aseguré.

—De acuerdo. Vamos —me dijo tomando mi maleta—. Te dejaré en el bar y me llevaré tus cosas.

Le seguí hasta su vehículo y como otros días condujo hasta mi destino manteniendo una charla casual de lo que sucedió el día anterior en la práctica o dándome breves detalles de lo que se avecinaba, aunque pude intuir que omitía algunas cosas, tal vez porque aún no estaba tan informado, pero yo sabía lo que estaba por ocurrir lo mucho que me había preparado para prevenir las muertes de mis mejores amigos y tal vez cambiando parte de la historia, supongo. Eso me provocaba inseguridad.

Cuando llegamos, me despedí de él asegurándole que llegaría con los chicos a la hora acordada y que no tendría que preocuparse por nada. Chris se marcó confiando en mí y yo me adentré al bar cuando vi a mis amigos.

—¡Brooke! —escuché la voz de Finn llamándome desde su mesa— ¡Aquí estamos! —me indicó con una sonrisa. Y sin perder más tiempo me acerqué a ellos diciéndome que debía estar tranquila pese a saber lo que sucedía en la misión de Edonia.

—¿Y el teniente Nivans? —me preguntó Ben con una sonrisa antes de darle un trago a su cerveza.

—No sé, no lo he visto —respondí abriendo una cerveza.

—Sería más fácil encontrarlo si salieran —insinuó Andy observando la boquilla de su cerveza, provocando que casi escupiera la mía y comenzara a toser.

—¿Qué has dicho?

—Solo digo que sería más fácil encontrarlo —me miró con un gesto desinteresado, pero yo sabía que solo fingía y percibía su burla entre líneas—. Así si le mandas un mensaje te responderá de inmediato diciéndote donde se encuentra —agregó y ahí mostró su sonrisa burlona.

Yo solo pude soltar una risa nerviosa dándole un trago a mi cerveza para tomar valor antes de soltar—: ¿De qué hablas? Puedo mandarle mensaje ahora mismo preguntando dónde está y me responderá sin necesidad de salir.

Juraría no encontrar la respuesta a mi estúpida pregunta de qué diablos estaba haciendo en ese instante. Una voz en mi cabeza me lo preguntó y yo solo pude decirle «No lo sé» imaginando que se daría un severo golpe en la cabeza por mi respuesta.

—Bien, mándale un mensaje entonces —me retó Carl—. Tenemos poco tiempo aquí y él aun no llega.

—De acuerdo, lo haré —hablé tratando de ocultar mis nervios. Tomé mi teléfono y lo busqué en mi corta lista de contactos deslizando mi dedo por la pantalla lentamente, deseando que el teniente llegar antes de que le escribiera un mensaje ¿Qué si me iba a responder? No estaba segura, después de todo era la primera vez que le mandaba un mensaje.