Mi Pequeña Desventura

Capítulo 13

—Cassie preparaba el almuerzo... —responde Ryan.

—Huele bien —responde Max.

—Si quiere le sirvo un ... —ofrece Cassie.

—No, gracias, regrese temprano porque necesito hablar con Mariana...

—A esta hora suele estar en el supermercado ..—informa

—Bien, cuando llegue hágamelo saber.

—¿Por qué quieres hablar con ella?

—Haré una reunión con algunos amigos de la facultad, y necesito que compre algunas cosas —explica.

—¿Hoy?

— Mañana.

—¿En la noche ...?

—En la tarde, a las cinco.

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Max descarga su mochila en la silla, tenía que terminar algunas anotaciones pero se encontraba bastante emocionado por la reunión con sus compañeros.

En cuanto toma asiento, recuerda la imagen de Ryan y Cassie.

"Parecían amigos"

En el campamento no parecían tan cercanos, la supervisora de Ryan parecía muy reservada y seria, totalmente diferente a él.

¿Esto era bueno o malo?

No lo sabía.

Pone sus brazos detrás de la cabeza.

Si Ryan había terminado con Alex, podía conseguir otro noviazgo; aunque no podría asegurar que lo de Alex haya sido un noviazgo. Por lo que recordaba la estaba alejando?

¿Por qué?

Bien... no lo sabía ...

También recordaba que había utilizado a su supervisora. ¿Sería ella consciente sobre eso?

Supongamos que lo es, ¿Tendría tan poca dignidad para dejarse manipular de esa manera? ¿Cómo es que Ryan lograba que las mujeres a su alrededor hicieran todo lo que quisiera?

Era muy injusto.

¿Debería prevenir a esa pobre mujer?

Tenía un mal presentimiento.

Cuando llaman para cenar, piensa en varios buenos argumentos para convencer a su madre de dejarlo hacer su reunión.

Mientras engulle un trozo de carne, mira a Ryan comer inocentemente y seguir la conversación de sus padres.

— ..... es una reunión esporádica, no se encontraba en mis planes, pero como tu abuela quiere vender sus acciones, tengo que llevar una buena relación con los accionistas minoritarios ..

—Dilo con más sarcasmo Claudia, creo que la mitad de tu familia no lo entendió  ... —dice Emma.

Claudia ignora sus respuesta y continúa.

—Ronald, mamá y yo iremos para demostrar que no los excluimos de ninguna decisión.

—¿Yo?

—¿Yo?

Emma y Ronald hacen la misma pregunta al mismo tiempo.

Emma frunce el ceño por ello y decide ampliar su disgusto.

—No estoy de humor para ir a esas cosas.

Claudia se toma un segundo y responde.

—No es una opción, tenemos que ir.