La señora Collins se jactaba de ser una mujer muy paciente; había conseguido todo lo que poseía en base a esfuerzo, constancia y mucha pero mucha paciencia.
Pero ahora que veía el rostro desinteresado de su hijo mayor, empezaba a perder la esperanza en su buen juicio.
—¿Sabes que hora es? —pregunta, con calma en medio de la enorme sala de su costosa mansión.
—¿Las ... 9 ...? —responde acariciando la parte de atrás de su cabello.
—Si, las 9.... deberías estar en la universidad .. o trabajando.
—Ya hablamos de esto .... no me gusta la universidad .... es aburrida y ¿trabajar? — arruga el rostro — es demasiado esfuerzo; y ya hago bastante.
—¿Cómo que?
—Ya sabes .... —bufa —salir a fiestas, gastar dinero .... salir con mujeres ....
Ante sus ofensivas palabras se masajea la frente.
—Pretendes que pierda la cabeza verdad?
—Mamá....... somos asquerosamente ricos —se acomoda las gafas oscuras, que ocultan sus ojeras —no necesitó estudiar o alguna de esas cosas ...... —descarta esas palabras con un movimiento de mano— puedo disfrutar de todo el dinero que tengo.
—Es mi dinero Ryan.
—Pero soy tu hijo .... no dejarías a tu amado primogénito sin dinero cierto?
—Dios .... que hice mal ...
—No seas dramática, porque no te tomas el día libre. Trabajas demasiado, deberías delegar, como todos los millonarios.
—Llamaré a tu padre te lo advierto.
—Papá esta durmiendo.
Desgraciadamente tenía razón, su esposo era otra carga sobre sus ya pesados hombros.
Pensó, y pensó en alguna manera de enderezar al árbol torcido de su hijo.
La educación no funcionaba.
La milicia?
No.
Se conocía y no soportaría no verlo por numerosos días.¿Quitarle el auto? ¿Las tarjetas ? lo más probable sería que se mantuviera en el sofá mirando la televisión, alimentándose de frituras.
Un trabajo dentro de la compañía? Ya lo había intentado y fue despedido.
—Ya acabaste? Quiero ir a dormir. Más tarde pasaran CSI en la tv— extiende los brazos en un bostezo.
Estuvo muy cerca de soltar una maldición, apretó la boca para no recurrir a palabras malsonantes, entonces nota a la mujer pequeña vestida con el uniforme habitual de limpieza, pasando un paño por los muebles. Pensó en pedirle que se retirara; la idea de tener a alguien escuchando sus discusiones la disgustaba.
—Disculpe, Señora Collins —Alexandra, su asistente llega corriendo, con su habitual carpeta apoyada en el brazo —Su reunión de las once... , si no salimos en algunos minutos, el tráfico nos imposibilitará la llegada.
Su mente trabajó en buscar alguna manera de disciplina para su hijo.
—Mira mamá, estoy bastante cansado y mi humor no es el mejor, sugiero que dejemos este tema aquí —Ryan se dirige hacía las escaleras.
Su insolente hijo estaba ganando esta partida.
Tenía que decir algo, inventar cualquier cosa, .... pasea la mirada por todo la habitación... piensa, piensa .. era una mujer fuerte ... no había nada, nada en este mundo que no tuviera solución y su hijo no sería la excepción.
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Mi Pequeña Desventura
ChickLitRyan no cree que sea una mala persona o un mal hijo, su madre exagera, y tener que convivir con una mujercita tan desesperante como Cassie no es algo que le guste. Cassie solo quiere llegar a fin de mes, si tiene que tratar con alguien como Ryan a...