ᴄᴀᴘíᴛᴜʟᴏ 11

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- ¡ES ELLA! ¡ES ELLA!

Bokuto se abalanzó sobre sus amigos con el teléfono en la mano. El trío se quedó a dormir en el departamento de Kuroo luego de la salida. Tetsuro y Oikawa cayeron dormidos en la cama mientras que Kotaro se quedó en el sillón.

- ¡Correte búho idiota! – El morocho empujó a su amigo provocando que cayera el suelo, pero el volvió a subir. Esta vez no dijo nada, solo señalaba el celular y aguantaba las lágrimas que se asomaban - ¿Qué pasa? Estoy demasiado dormido, vas a tener que explicarme

- Es ella, Kuroo, es ella. La perdí

El ex Fukurodani le pasó su celular al joven, el mismo mostraba una historia que subió Jin a Instagram, donde se la ve con el vestido que Bokuto había identificado en la discoteca. Al instante, Kuroo entendió lo que su amigo le estaba diciendo y despertó a Oikawa, quien increíblemente seguía en un profundo sueño.

Una vez levantados y más despiertos, el trío comenzó a cocinar el almuerzo, ya eran más de la 1 de la tarde. Analizaron una y otra vez tanto la foto que subió ella, como la que publicó Yuji, ya no quedaban dudas, la chica de ayer era Jin.

- Oigan, ¿recuerdan al chico que salió con ella?

- La verdad es que no, no podía dejar de mirarla – Bokuto suspiró rendido

- Si, tenía el pelo gris y algo rapado, de frente no lo vi

- Bien, tengámoslo en la mente por si los volvemos a ver juntos

- Ahora, vamos a pensar tu próximo movimiento, es hora de hacer algo al respecto – Arengó Oikawa

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Mientras tanto, en otro sector de la ciudad el colocador de MSBY Black Jackals se dirigía al departamento de su hermano con toda la felicidad del mundo, es que sabía que Samu le prepararía los mejores onigirs del mundo.

El peligris lo invitó a pasar, Atsumu Miya rápidamente sintió un aroma a comida, lo que le hizo rugir el estómago. Mientras Osamu terminaba de preparar, él se dirigió al comedor para poner la mesa. Una vez terminada su tarea, se sentó en el sillón al mismo tiempo que prendía la televisión y como tenía frío se colocó la manta que posaba en él apoya brazos. El delicioso aroma a onigiris fue sustituido por una intensa fragancia.

El rubio se concentró en el color y enseguida se dio cuenta de que provenía de la manta. Tardo unos segundos en atar los cabos sueltos, cuando lo hizo, brincó del sofá como si de una escena del crimen se tratara. Justo en ese momento, su hermano traía el almuerzo y lo posaba en la mesa.

- ¿Qué te sucede? – Preguntó Osamu con su característica templanza. El colocador puso la mejor cara de cómplice del mundo, lo que extrañó aún más al peligris – Hoy estás haciendo el tonto más de lo normal

- ¿Era linda?

- ¿De qué hablas Tsumu?

- No te hagas el sorprendido, se huele a kilómetros que aquí hubo una presa

- No digas presa, Tsumu, suena horrible – Osamu se llevó la palma a su frente, mientras el rubio reía – Si hubo una chica acá, pero no pasó nada

- Bueno pero cuéntame, sos tan difícil que al final nunca salís con nadie. Igual ahora que recuerdo, fuiste a Molly's ayer, ¿no? ¿Solo te la tiraste?

- No tengo nada para contar, llegamos y se quedó dormida, así que le puse esa manta y me fui a dormir. Hoy a la mañana logré besarla antes de que se fuera corriendo, pero no hablamos mucho, solo se su nombre

- ¡Vamos tigre! Te gustan difíciles, como tú. ¿Cómo se llama?, ¿la conozco?

- De hecho, si, la conoces – Atsumu terminó su bocado rápidamente y lo miro atento – Se llama Jin Leik

- ¿Sos idiota? ¿Sabés quién es? – Atsumu se había atragantado con la respuesta de su hermano, quien asintió tranquilamente

- No lo sabía hasta ayer, ella me dijo que es la ex de Bokuto

- ¿Te dijo explícitamente que es la ex?

- Bueno, no, pero tomarse un tiempo nunca termina bien. Además, yo ahora voy a estar tras ella, probablemente sea oficialmente ex dentro de poco

- Que maldad, Samu. Después me decís a mi que no tengo sentimientos

- Es que esa relación está rota Tsumu, no sé por qué, pero por algo se rompió. Él ya tuvo su oportunidad, cuando la vi ayer en la barra, Dios, Tsumu, es la mujer más hermosa. No sé, me flechó

- Bueno, ya, demasiado cursi. Yo solo te advierto algo, Bokuto, es Bokuto. Nunca lo vi enojado, lo cual me preocupa mucho y la relación entre ellos no es tan frágil

Durante el resto de la cena, Atsumu le contó a su hermano la historia de la ex pareja de Fukurodani y trató de convencerlo de no meterse en el medio. Sin embargo, Osamu no dio el brazo a torcer, enviándole un mensaje a la castaña.

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Kuroo dejó a Bokuto en su departamento con más preocupación que tranquilidad, conoce bien a su amigo y sabe que es una bomba de tiempo. También conoce bien la relación entre esos dos, siempre los envidió un poco y le daba mucha pena que esta terminara por un error tan evitable. Junto a Oikawa quedaron en ir a visitarlo con más frecuencia y en acercarse a Yuji, para intentar saber en qué situación están, es decir, cuántas posibilidades tiene Kotaro.

Por su parte, el blanquinegro, al contrario de lo que esperaban todos, estaba quieto. Siempre en sus días de descanso salía con amigos o iba a pelotear solo si no tenía a nadie, pero rara vez se quedaba en su departamento. Esta vez no tenía energía para salir. Una sola persona tenía el poder de hacer que la energía de Bokuto se acabe: Jin Leik.

Su domingo se resumió a mirar series románticas en Netflix y comer helado, cosa que nunca. En el medio habló con Akaashi, al morocho le había llamado la atención no recibir un mensaje de su amigo así que le escribió y quedó doblemente sorprendido al saber qué estaba haciendo. El ex colocador de Fukurodani pensó en ir a visitarle, pero luego consideró que tal vez Bokuto necesitaba pasar por este momento. 

𝑬𝒍𝒍𝒂 𝒗𝒐𝒍𝒗𝒊𝒐́ | 𝖡𝗈𝗄𝗎𝗍𝗈 𝖪𝗈𝗍𝖺𝗋𝗈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora