𝐔𝐍𝐀 𝐋𝐈𝐍𝐃𝐀 𝐁𝐄𝐍𝐃𝐈𝐂𝐈Ó𝐍 | 𝐓𝐨𝐤𝐲𝐨 𝐫𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞𝐫𝐬

Como un Angel

"el enemigo es capaz de muchas cosas, asta de matar al Angel más puro de la tierra"
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2017 | New York

—entonces no encontraron nada?— la mujer hizo un leve puchero y miró mal a los hombres que estaban serios

—no, el lugar fue allanado por la policía, sería muy riesgoso ir de nuevo, recuerda quiénes somos Michiru— la mujer asintió y los miró con la cara más seria posible

—entonces la llamada?...

—la mujer Tenía razón, más las fotografías y ubicación de Hanma, intenté comunicarme con la señorita Ada pero no pude

—posiblemente Hanma ya la descubrió y mató— la mujer lo dijo muy normal que le dio un escalofrío al albino de cabello largo

—ojala no, eso significaría un problema con Boten, sin contar que estamos actuando a espaldas de Mikey

—Koko tiene razón— el de cicatriz en el rostro habló dejando a un lado su laptop—Hoy en la noche volveremos a la mansión, tenemos un vuelo

—no volveré, me quedaré un tiempo más creo… no pertenezco a Boten por lo cual soy libre

—tienes razón en eso, pero no te vamos a dejar, es peligroso

—bueno! Entonces iré a pasear a las afueras del hotel

La mujer salió del hotel para dar una vista a los autos transitando la gran ciudad, camina por unas calles poco transitadas por autos

Tu pequeña tranquila se dio interrumpida por una llamada de su “amiga” Rin

—no pensé que me llamarías, ¿paso algo en Japón?

—me fui de la mansión Michiru, me fui de ese Lugar

La mujer soltó un oh y espero más palabras de la mujer

—Están investigando a una tal Maiko verdad?

La mujer se quedó callada, pues nadie le había dicho eso a Rin, era de conocimiento de ella y de algunos ejecutivos de Boten

La mujer fue a un callejón y ahí hablo más claro con Rin

—¿cómo mierda sabes eso?

—eso no te importa, me podrías decir toda la información que encontraron?

— la mujer solo río por la estúpida mención de Rin

—claro que no, no soy una puta traicionera

—Michiru, estoy frente a Claude Nakamura— la mujer se tenso al escuchar ese nombre, tartamudeo pero sin pensar de su boca salió todo lo que mencionó Kokonoi hace unas horas

—gracias, y sin contar esto a nadie Michiru, será un pequeño secreto entre ambas, ¿Si?— la mujer no contesto y colgó, sacó la tarjeta de memoria y el chip y los destrozó para botarlo a un basurero

—estoy muerta…— susurró para si misma y mira el cielo— maldita hija de puta

—le hablaste?— el hombre de cabello negro y ojos de color rojos y profundos miró a la mujer de cabello corto y soltó un suspiro

—Michiru tienen un gran aprecio por Haruka, lo quiero aún que lo niega, si algo sale mal podríamos amenazar a su noviecito— la mujer deja el casco de su moto y mira directamente a los ojos del hombre

—Confiar en ti posiblemente me traiga problemas, no me fío de mujeres como tú, solo porque eres amiga de mi hermana estás aquí— el hombre río y me sentó en un sillón de cuero cruzando sus piernas y mirado tras la ventana