Estragos

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Capitulo. – Estragos

Maldición, no llegue a tiempo para rescatarlo, aunque mis espías me informaron a tiempo de su paradero, el malnacido líder de los barbaros se movió rápido evitando que lo salve.

Aunque se apresuró para llegar a tiempo y poder salvar a su querido amigo Misaki, llego tarde por que los Barbaros se habían movido rápido para mover a la gente del reino del Este que habían capturado con vida.

Cuando el general Mikhail recibió la noticia de que el reino vecino del Este está siendo atacado despiadadamente por los Barbaros sin pasar por el reino del Norte. Le dio mala espina y junto a sus mejores hombres más fieles lo siguieron a la guerra.

Así lo hicieron importándoles poco de ser acusados por traición, pero no era justo lo que estaba sucediendo con el reino vecino.

Mientras el General Mikhail partía al Este, un mensajero enviado por él se dirigía al Norte, infórmale al Rey Asami su firme decisión y despidiéndose de su más querido y entrañable amigo Asami Ryuichi, ya que sabe que los Barbaros son barbaros, sabe de antemano que no regresará con vida, pero primero tendrá que salvar y regresar con vida a su buen y querido amigo Misaki.

Con quien compartió anécdotas jamás contadas a nadie.

¡Ahora solo me queda rezar para que sigas con vida mi querido amigo Misaki!

Mikhail: cuídate por favor, procura permanecer con vida mientras te encuentro Misaki; no descansare en paz hasta que estés de regreso y a salvo. Viviendo una vida tranquila como sueñas tener.

Al general Arbatov Mikhail solo se le puede ver rodar una lagrima de sus ojos mientras su opaca mirada es dirigida al cielo nocturno. Su nostalgia, su frustración y su dolor se resguardan dentro de su corazón.

El murmullo de voces esparce lo sucedido, el General Arbatov Mikhail a muerto.

El sollozo de la gente se escucha en el viento, lloran por la pérdida de su única esperanza que fue a su auxilio y dio su vida por salvarlos de los despiadados barbaros.

Con las pequeñas fuerzas que tenían los pobladores combatieron a lado del General Mikhail. Cuando vieron que el General Mikhail había caído corrieron para salvar su cuerpo al igual que los cuerpos de aquellos valientes guerreros que han muerto a manos de esas bestias.

Los aldeanos como pudieron arrastraron los cuerpos hasta las ruinas del palacio real ahí los colocaron con cuidado alado del cuerpo del General Mikhail.

Embalsamaron los cuerpos ya que saben que no tarda el Rey del Norte en enviar por ellos.

Arreglados los cuerpos fueron cubiertos con sábanas blancas que una anciana siempre guardaba entre sus cosas, por suerte los barbaros no destruyeron por completo su casa, así que sobrevivieron unas cuantas cosas de la anciana entre ellas las sabanas que ahora sirven para cubrir los cuerpos de los valientes hombres.

Prendieron incienso y oraron por las almas de los hombres muertos en batalla.

Los pocos aldeanos que sobrevivieron se reunían todos los días en las ruinas del palacio real, comían todos juntos una vez al día ya que todo está destruido al igual las tierras para cultivar.

Comían lo poco que encontraban entre los escombros, ya que son muy pocas las personas se reparten lo que encuentran para tener algo de alimento en sus débiles estómagos. Se ayudan entre sí para tener un techo en el cual pasar la noche. Así fueron los siguientes días que pasaron.

Cuidándose entre sí, curándose sus heridas y sepultando a sus familiares y ajenos. Así se convirtieron sus días Limpiando los estragos del a masacre que sufrieron.

Antiguo Dolor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora