Bestia. (Volkacio AU) [Omegaverse]

Capítulo 3

Suspiré entrando otra vez en los vestuarios, cada día me dan más asco.

- Horacio. - Me paró Conway en los vestuarios.

- ¿Si?

- Ayer me dijeron que casi te pegas con un compañero aquí. - Me dijo cruzandose los brazos.

- ¿Se han chivado? Déjame adivinar. El ruso. - Me reí negando con la cabeza quitándome la camiseta corriendo volviéndomela a poner.

- ¿Volkov sabía del incidente?

Me dijo haciendo que me quedase paralizado, ha sido el otro que se ha chivado.

Aunque no empecé la pelea, le miré.

- Si me quieres sancionar, sancioname. Ya ves tu.

- Si no la empezaste tu. - Gustabo interfirió por primera vez en una 'discusión' mía.

- Gustabo. - Le reñí, el súper lo miró haciéndole seña de que siguiera.

- Fue el Brown este, que acorraló a otra oficial, omega y Horacio la defendió, el otro se enfadó y después quiso pegar a mi hermano. A ver si antes de nada sabes las dos versiones.

- He venido a escuchar la parte de Horacio, Gustabo. - Dijo mientras los vestuarios comenzaron a invadirse de lima y menta. Se estaba poniendo tenso.

- Gustabo déjalo. - Le reñí cerrando mi taquilla poniéndome al lado de el, estaba en posición defensiva, igual que Conway.

- No sé que bicho te ha picado esta mañana García, pero te lo advierto, no me toques la moral.

- La moral no va a ser lo último que te toque como siga así.

- ¡Gustabo para ya! - Le alcé la voz, me miró, sus ojos estaban dilatados mientras sus feromonas comenzaron a oler más fuerte.

- Pues defiéndete y no te conformes con el inútil este. - Me dijo en un gruñido básicamente, si en una ocasión era difícil de controlar era cuando mi hermano se ponía así.

- Gustabo.. - Le susurré mirando levemente hacia abajo, me cogió de la cara para alzarme la mirada.

- No seas sumiso. - Me dijo en el mismo tono de voz buscándome los ojos y tirándome para atrás después haciendo que casi me cayera del impulso. Menos mal que no había nadie más ya que se había aclarado.

Se fue de los vestuarios dejándome allí mirándole a Conway.

- Está cerca del celo. - Dije después de aclarar la garganta y aparté la mirada.

- Horacio.. - Me dijo.

Cogí el arma de mi taquilla y me fui de allí prácticamente corriendo, me fui al garaje donde estaba Volkov. Se olía la canela de metros.

Suspiré profundo intentando no ahogarme, estaba temblando ligeramente, Volkov estaba en el asiento de copiloto así que me subí al conductor.

- Llega tarde. ¿Eso va a ser todos los días? Por saberlo. - Me dijo en un tono de enfado.

No le dije nada, simplemente arranqué el coche aclarando la garganta intentando de dejar de temblar.

- ¿Horacio? - Me preguntó pero no dije nada, necesito unos minutos para recuperarme.

- ¿Horacio?

- ¡Cállate! Joder. - Le chillé ahora a el, le pegué con la mano abierta al volante haciendo que pitara.

La canela se puso asfixiante.

- A mi no me hable así. - Me dijo, le miré y su cara cambió, no sé cómo se me veía la cara pero se podía ver preocupación en su mirada.