Tú eres lo que necesito

Capítulo 9

- ¿Has venido a por mas?- Digo mientras abro la puerta. Seguro que será Rai. Viene para pasar aquí la noche. Se ha dado cuenta de que eso es lo que necesito para olvidar a Julián.

-  Que gran recibimiento.- !Julián¡ Entra sin pedir permiso y se sienta en el sofá. Yo me he quedado helada ahí en la puerta. Me giro furiosa - Cierra la puerta nena y ven aquí. - Da unos golpecitos al asiento del sofá.

-  Julián ¿Qué coño haces aquí?- Le grito.

-  Nena, sabía que no irías a la fiesta, te conozco, no has cambiado nada en este tiempo. Pero no me esperaba que vería como se la chupas a tu novio en el coche. - Yo sigo de pie enfrente de él, cojo el cojín del sofá y se lo tiro a la cara. Que vergüenza. 

-  Eres un cerdo. Un imbécil. Un gilpollas. - Dios estoy furiosa. ¿Me ha visto? Joder... quiero que se vaya. - Vete- Le grito y corro al baño y cierro la puerta. Lloro. Mierda. Julián te odio.- Vete.- le vuelvo a gritar. Oigo sus pasos acercándose al baño. - Vete joder, vete. Vuelve a Nueva York. Olvídate de mí como has hecho estos 7 años. Déjame.

-  Nena, ábreme, perdona, soy un imbécil, yo tampoco he cambiado. Pero en todo este tiempo no he conseguido olvidarte.

-  ¿Qué no me has olvidado? Te fuiste ¡tu! y no me has llamado ni una sola vez en 7 años. 7 putos años- le grito desde el otro lado de la puerta.- Me dejaste tu y mientras tu te dedicabas a vivir la vida y follarte a un montón de tías yo tuve una hija y ese mismo día el mejor día de mi vida tuve que enterarme que mi novio había muerto y ni me llamaste, tu mi mejor amigo. No me llamaste. No te preocupaste por mí. Ni una sola llamada en 7 años. Eres un cabrón. 

Me he sentado en el suelo al lado de la bañera a llorar. Julián entra despacio y al verme en el suelo corre hacía mi y me abraza. Su brazos, estoy furiosa, pero en ellos me siento seguro. Le odio y le amo a la vez. ¿Cómo puedo sentir eso?

-  Eh eh, nena, mírame, no llores, perdóname. Quise llamarte. De verdad, pero me dio miedo. No sabía como reaccionar a eso. Me he pasado todos y cada uno de los días pensando en volver y besarte y no sabía como hacerlo. Primero Marta me contaba que habías conocido a un chico y que eras feliz, y no quería ser yo quien te quitara esa felicidad, luego que estabas embarazada y el mundo se me vino encima. No era yo quien iba a darte un hijo.

-  Julián, te fuiste, me dejaste. ¿Y me estas diciendo que en 7 años no has encontrado momento para llamarme? ¿Y qué no me has olvidado? Y una mierda.- Le miro, sigo llorando. Me quita las lágrimas con sus dedos. Adoro su aroma. Sus manos en mi cara me queman.

-  Perdóname, era joven y tonto cuando te dejé y luego me dio vergüenza admitir mi error. Ya sabes como soy, un orgulloso. Cuando supe lo de Iván ya no sabía como actuar frente a ti, que decirte, que hacer. Marta me contaba lo mal que estabas y juro que cada día cogía el móvil para llamarte pero nunca me atrevía, se me secaba la boca. Hace un par de semanas Marta me contó que empezaba a ver en ti a la Alex de siempre. Y supe que este era el momento. No me lo pensé mas, decidí actuar de una vez y volver a por ti, a cumplir mi promesa de casarme contigo. No sabía que tu y Rai ibais enserio. Marta me dijo que fue un rollo.

¿Marta? ¿Marta le habla de mí? ¿Marta mi mejor amiga? Marta la que no me dice a mi nada de nada de Rai y luego me lo presenta y cuando tengo algo con el me dice que no ¿Esa marta?

- Marta es imbécil igual que tu, ¿Qué mierda hace contándote mi vida?. - Estamos los dos sentados en el suelo. Uno al lado del otro.

-  Nena, dejarte fue lo mas duro que he hecho nunca. Pero no quería reconocerlo.

-  Julián, nunca he dejado de pensar en ti. Todos los días soñaba con volver a verte, y que vinieras a rescatarme del infierno que estaba viviendo. Mi hija era lo único que me mantenía a flote. Pero no es justo que vengas ahora. Que vengas cuando estoy bien. Una pareja está para lo bueno y para lo malo y tu solo quieres estar en lo bueno. No es justo. No lo quiero así. Vete.