Lover ⚜️Daniel Ricciardo ⚜️

46

11 de Septiembre de 2021
Autódromo Nazionale Monza, Monza.

Carola, sus hijos y yo nos encontrábamos en el hospitality de McLaren comiendo unas deliciosas hamburguesas con extra papas, acompañado de agua.
Aún faltaban 3 horas para la qualy así que teníamos tiempo suficiente para comer de todo un poco.
Nuestros hombres desaparecieron de nuestras vistas en el momento que iniciaron nuestros antojos. ¿Los necesitábamos?, la respuesta es NO. Teníamos a mis hijos que se han comportado de la manera más linda posible con nosotras dos.

-Jodida hamburguesa, está riquísima.- dije mirando a la hamburguesa que tenía en mis manos.

-Creo que ves con más amor a la hamburguesa, que a Daniel.- reí y asentí.

-Sólo que no le digas a Dan, hará su drama.- ambas mordimos la hamburguesa y cerramos los ojos deleitando el sabor.

-Esto está igual de sabroso que mi esposo.- reí.

-Mami, quiero.- Carola bufó.

-Mi amor, está hamburguesa es de mamá.- Sergio le hizo un puchero, ella bufó.- Esta bien niño tragón.

-No tanto como tú mami.- solté una carcajada.- Y cómo mi tía Sam.- deje de reír.

-Golpe bajo, mini Checo.- él sonrió burlón.- Golpe muy bajo.

-Hola, señorita Brown.- volteé.

-Hola, Francisco.- le sonreí al ingeniero.- ¿Se te ofrece algo?.

-Un señor la busca afuera, ¿lo dejamos entrar?.- lo miré confundida.

- ¿Te dijo quién era?.- preguntó Carola.

-Se llama Nicolás, me dijo que quería pasarla a saludar.

-Esta bien, déjelo entrar.- el asintió y se fue.- Qué mierda hace aquí.

-No lo sé, pero sabes que no me cae bien.- Carola se cruzó de brazos.- ¿Por qué lo dejaste entrar?.

-Quiero saber que mierda quiere.

-Un idiota llegando en tres.....dos....uno y está aquí.- Carola bufó. No le agradaba y él lo sabía.

-Buenas tardes, Sam.- volteé a verlo.

-Hola, Nicolás.- asentí en forma de saludo.

-Hola Carola.- ella le reviró los ojos y siguió comiendo.- Creo nunca le voy a agradar.- rió levemente.- ¿

-¿Qué haces aquí?.- pregunté de brazos cruzados.

-Vine a ver el premio y quise pasar a saludarte y pedirte si podíamos hablar.- me sonrió.

-Yo no tengo nada que hablar contigo Nicolás, ya todo lo deje claro.- dije muy seria, él hizo una mueca.

-Lo sé y créeme que no vengo a pedirte otra oportunidad.- el rascó su nuca.- Yo quería pedirte una disculpa.- lo miré confundida.

-Pendejo si piensa que vas a creer esa mierda.- Nicolás rió.

- Lo digo enserio, Carola.

-Mierda, se me olvidaba que eres latinoamericano.- comió una papa.- Pero que bueno que lo sabes.

-Entonces, ¿podemos hablar?.- asentí.

-Sí, pero aquí. No quiero ir a otro lugar y malinterpreten las cosas.- él asintió.

-No te preocupes, de hecho yo tampoco quiero eso.- lo miré confundida.- Cierto, estoy comprometido.- abrí la boca sorprendida.

-No te creo.