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Cherry había decidido dormir un poco, se había despertado muy temprano, sin contar que no pudo dormir bien por estar con el pendiente de quedarse dormida y no ir al viaje. Eso la mantuvo ansiosa toda la madrugada.
Asi que ahora se encontraba acostada en los asientos traseros, su piernas cubiertas por una pequeña manta de tela suave color escarlata y usaba su bolso como una especie de almohada.

Klaus y Cinco vieron a esta por el espejo retrovisor, Cinco de vez en cuando cuidando que la chica no resbalara de los asientos hacía el suelo del auto. Klaus riendo por dentro al ver como Cinco se preocupaba por Cherry, como lo hacía con ellos.

-Asi que, si te agradó. -Habla Klaus entre el pequeño silencio que había.-

-Bueno, no es tan fastidiosa como ustedes. Puede ser un poco rara, pero nada fuera de lo normal, es agradable y tiene cerebro. -Responde Cinco viendo su mapa entre manos.-

-Me alegra ver que te acoples con alguien de tu edad. Tal vez eso te hacía falta, conocer más gente. -Dice Klaus poniendo una sonrisa.-

-No lo necesito, pero el esfuerzo se aprecia.

El camino siguió calmado y un poco silencioso, Klaus de vez en cuando tirando algún dato o comentario demasiado tonto y Cinco taradeando la canción que pasaban por la radio.
Cherry seguía dormida, y como pudo, Klaus dijo un comentario que terminó confundiendo a su hermano "menor".

-Serían una pareja extraña.

-¿Qué? -Pregunta Cinco hacía Klaus.-

-Sí, sé lo que digo. Serían una pareja extraña. Imagina esto, la dulce chica amable y linda, con el chico amargado y gruñón. Pero siemore han dicho... polos opuestos se atraen.

-¿Klaus de qué hablas? -Pregunta Cinco mientras trataba de no encajar su pluma en la pierna de Klaus.-

-¡Ya llegamos!

Klaus pisa de forma rápida y ruda el freno, haciendo que Cinco y él se movieran leve pero bruscamente hacía adelante, ya que llevaban puestos sus cinturones de seguridad.
Esa suerte no fue para Cherry que rodó sobre el cuero del asiento para terminar cayendo con un fuerte ruido seco hacía el piso del auto, llamando la atención de ambos Hargreeves.

-¡Estoy bien! -Responde Cherry mientras alzaba uno de sus pulgares a la vista de Klaus y Cinco que solo asintieron y volvieron a seguir con sus cosas.-

Klaus bajó, pidiendóle a ambos adolescentes que lo esperaran en el auto mientras iba a buscar a su madre.
Cherry y Cinco solo asintieron mientras veían al mayor irse.

Cinco se fue hacía el asiento trasero, abriendo la puerta y recostandóse en una extraña pose, viendo los lugares que había encerrado en el mapa. Cherry estaba en el asiento delantero con la puerta abierta también, buscando alguna buena canción, cuando "These boots make for walkin" de Nancy Sinatra, dejando esa canción, Cinco taradeandóla y ella cantandóla en voz baja, mientras salía del vehículo, haciendo una pequeña caminata.
Ambos en sus cosas, pero viendóse de reojo uno al otro en ocasiones.

El día parecía ir normal, cuando sintieron una extraña vibración pasar cerca de ellos, y luego ver una fuerte ola, para luego regresar, pero en su regreso, ambos presenciando como las vacas en todo el lugar desaparecían mágicamente. Eso confundió pero alertó a ambos chicos, Cinco no dudó ni un segundo más y cerró las puertas del coche mientras sacaba su plumón rojo, comenzando a escribir en los vidrios un par de ecuaciones, soluciones, dibujos de ejemplo y etc. Estaba totalmente concentrado, y al parecer estaba muy interesado, pues en menos de 10 minutos había logrado llenar todo los vidrios de números, símbolos y letras, que para suerte, Cherry entendía.

-Ahí es cuatro. -Dice Cherry mientras señalaba una ecuación sin resolver.-

Y como si Klaus fuera un imán de problemas o tal vez tenía pésima suerte. Este apareció corriendo de detrás de la pequeña colina, gritando mientras bajaba la inclinada colina con césped y anteriormente vacas, dejando ver a un grupo de amish bastante furiosos.

-¡Enciendan el auto! -Grita Klaus repetidas veces desde lejos, obteniendo la atención de ambos chicos.-

Al ver a Klaus y el grupo de amish acercarse, Cherry corrió hacía los asientos traseros y Cinco hacía el lado del conductor, prendiendo el auto y dispuesto a arrancar.
Ambos miraron como una mujer amish le entregaba algo a Klaus que solo abrazó a la mujer y entró rápidamente al auto para que Cinco solo arrancara, alejandóse demasiado de los amish.

-¿¡Qué carajos fue eso!? ¿Sabés qué? No importa, tengo que contarte algo. -Habla Cinco, siendo interrumpido por Klaus.-

-¡Yo también! ¿Sabes que descubrí hoy? Que mi madre murió antes de que naciera.

Cinco dió un fuerte frenón al auto, haciendo que Cherry se fuera hacía enfrente y la pelirroja se diera un golpe contra el reposa brazos de los asientos delanteros, obviamente quejandóse de Cinco por ser tan "bestia" y sobar su cabeza con un puchero que Cinco no evitó ignorar.

-¿Qué?

-Sii, una de las amish, que resultó ser mi tía. Me contó que mi madre murió el primero de Octubre de 1989. El día que nací yo, ¡Que nacimos todos! -Habla Klaus mientras enseñaba el viejo y relleno libro que la que al parecer era su tía, le dió mientras huían de los amish.-

Cinco tomó este, comenzando a revisarlo y hojear la información que contenía cada página, noticias, noticias y más noticias sobre algunas mujeres que había muerto el mismo día. Curiosamente solo fueron seis, la cantidad perfecta de hermanos que conformaban a la Academia Umbrella, todas murieron de la misma manera y a la misma hora. Cherry ayudaba a revisar el libro, leyendo las noticias y dandóse cuenta de esos detalles.
Era sospechosos, solo seis mujeres, de la misma forma, el mismo día y hora. Y si se fijaban en las fotos que estaban ahí, encontrarían los grandes y algunos parecidos que las madres tenían con sus hijos.

Los tres estaban confundidos. No sabían que decir, pero sabían que tenían que informarle sobre eso a los demás Umbrella, asi que a toda velocidad, Cinco condució de nuevo hacía el hotel Obsidian. Cherry leyendo las noticias intrigada.

Cherry || Five HargreevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora