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Dos semanas después ya estamos de vuelta en Hogwarts. Me visto para salir a entrenar con el ED, ya que habíamos quedado esta tarde a las cinco.

Camino por los pasillos del castillo cuando de repente alguien me coge del brazo.

-Eh, imbécil- digo al percatarme que es Draco- suéltame el brazo

-No- responde secamente- primero dime donde estabas en el baile de Navidad, te busqué por todas partes, aún tenemos un asunto pendiente

-¿Qué?

No me da tiempo a decir nada más, porque comienza a besarme

-Draco... Para...

-Shh... Calla Potter, solo... Déjate llevar.

-¡Suél...!- mi grito es callado por un beso más profundo y un toqueteo de muslos. Toqueteo que va subiendo hasta llegar a la ingle.- ¡Draco!

-Gimelo más fuerte, nena

-Porfavor...-suplico mientras lárgimas inintencionadas se deslizan por mis mejillas

De repente un puño me sorprende. O sorprende a Draco, que se toca la sien, dolorido.

Miro a mi salvación, que se aparta el pelo largo y pelirrojo de la cara con la mano.

-Como la vuelvas a tocar pienso arrancarte tu pelo rubio de mierda uno a uno y enganchártelo en el culo, ¿me has entendido?

-Esto no quedará así- dice con una expresión neutra, cosa que me sorprende- créeme

Luego se levanta.

Aunque, justo antes de irse, puedo ver como una reluciente chapa de color rosa chillón brilla en el pecho de su túnica. Se aleja rápido, pero me da tiempo a leer las letra I.

-¿Estás bien, amor?- pregunta susurrando, cogiendo mi barbilla con una mano y moviendo mi rostro para asegurarse de que no tengo nada

-Sí, Gin... Sí- digo retirando mi cara de su mano.- No me fío de él

-Nadie lo hace- dice ella sonriendo- Ahora vayamos con el ED, llegamos tarde

Una vez en la sala de los menesteres, nos reunimos todos en círculo, saludándonos unos a otros, preguntándonos como habían ido las vacaciones de Navidad. 

Luego atendemos a Harry

-Para el hechizo de hoy, solo debereis pensar un recuerdo feliz- dice- un patronus corpóreo es difícil de crear, pero lo podéis intentar

Cuando todo el mundo se dispersa, me pongo manos a la obra.

"-Harry...- susurro hace dos años, cuando me encontré a Harry y a Sirius tumbados en el suelo. Sirius por fín despertó, y se puso a dar vueltas por el lugar, despejando la mente.

Las lágrimas recorrian mi rostro, mi hermano no despertaba. O eso pensaba.

De repente sus ojos verde esmeralda, como los de nuestra madre, se abren, parpadeando poco a poco. Le sonrío y me sonríe

-Harry, por Merlín- lloro abrazándole con fuerza. Él, débilmente me devuelve el abrazo- Pensaba que te había perdido

-Nunca me perderás- dice- No pienso dejarte sola

Esa frase fue la más reconfortante que me habían dicho nunca. Él besó mi frente con fuerza, y fue cuando de verdad lo supe

Nunca estaría sola, siempre que mi hermano estuviera ahí."

La figura de un perro azul y blanco, corretea por mi alrededor. 

Es el mismo patronus que Sirius.

Sonrío al pecatarme

-¡Perfecto Nea!- me felicita Harry

Todo son risas; carcajadas, animales corriendo, volando, saltando, reptando y nadando por la sala, hasta que de repente se escuchan dos golpes secos.

Todos nos miramos entre nosotros. Harry y yo cruzamos miradas y ambos nos dirigimos a la pared, donde se encuentra la puerta.

Por un pequeño agujero puedo ver la cara de Umbridge, que apunta a la pared con la varita a la vez que recita "Bombarda Máxima"

Cojo a Harry del brazo, que se ha acercado a la misma altura que yo, y salgo corriendo con él, alejándolo de la pared, y poniéndome delante suyo para que no se haga daño si la pared explota.

Un gran agujero llena la sala, por donde se puede ver, ahora a cuerpo completo, a Umbridge, a algunos alumnos de la casa Slytherin y, por supuesto a Draco, que sujeta entre sus manos a Cho Chang.

Se ha chivado.

-Cogédlos a todos- dice la voz irritante de la cara de sapo, antes de que los alumnos de Slytherin nos cogan a Hermione, Harry, Ron, Ginny, Neville, Luna y a mi.

GIRL IN RED || Ginny Weasley {wlw}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora