Mía

capítulo 26

Ya todos estábamos listos para dormir y subimos a las habitaciones. Yo estaba tirada en la cama esperando a que Ryan terminara de cambiarse.

-Siempre me gusto como se te mira el cabello largo -dijo riendo mientras se colocaba el pantalón.

-¿Por eso en primaria me lo jalabas todo el rato? -pregunte riendo.

-Algo así. Según mi papá había que llamar la atención como fuera, y como no sabia como hacerlo...

Me senté de golpe. Y lo mire con los ojos muy abiertos.

-Espera. ¿Te gustaba cuando éramos pequeños? -dije con una sonrisa.

-¿Por que te sorprende tanto? -alzo las cejas con una sonrisa.

-Bueno, a ver; te peleabas conmigo todo el tiempo, te burlabas de mi y otras muchas cosas -me rei.

-Discúlpame por no saber expresar mis sentimientos a los siete años -se acercó a mi.

-Sigo sin creerme que te gustaba.

-Pues fue así. Pero después te fuiste del pueblo y bueno... -se encogió de hombros.

De un momento a otro la conversación dejó de ser recordado nuestra infancia a algo más picante por lo que decidí que ya era hora de irnos a dormir. Llamenme aburrida o lo que sea pero tengo sueño y estoy cansada.

-Bueno, ¿ya vamos a dormir? -escale hasta el lado donde dormía.

-¿Dormir? -alzó las cejas con una sonrisa oscura.

-Solo dormir.

Rodó los ojos con la misma sonrisa y se acostó a mi lado.

(...)

Llevaba tiempo intentando dormir pero no lo estaba consiguiendo. Me gire y mire la ancha espalda de Ryan. Me pregunto si esta dormido.

-Ryan... -susurre.

-¿Si, amor? -dijo con voz cansada.

-No me puedo dormir.

Hubo un silencio bastante largo hasta que Ryan se dio la vuelta para verme, o intentar hacerlo. La ventana que había de mi lado hizo que pudiera ver un poco de su cara, me arrepentí de haberlo despertado al ver las ojeras de tenia.

-¿Qué es lo que no te deja dormir? -me pasó una mano por el cabello

-¿Como sabes que es por algo? -parpadee

-Porque casi no has hecho preguntas durante la noche -rodó los ojos divertido

-Es que, tengo una sensación extraña desde que Laura se convirtió -confesé.

Y era verdad. No me gusta pensar en ello pero la verdad intento saber cómo se convirtió ella. Y como nadie me lo quiere decir me como la cabeza intentando buscar cosas que se me escaparon la noche de la fiesta de la playa.

-¿Es sobre quien la transformó? -pregunto tensando los hombros.

Asenti.

-Eso es algo que ella te tiene que decir.

-Laura no me dirá nada.

-Son amigas desde siempre. Seguro te lo cuenta en cuanto se lo preguntes -me aseguro.

Asentí no muy convencida.

-Trata de dejar de pensar en eso y descansa -dejo un beso en mi frente.

Me acurruque en su pecho y cerré los ojos escuchando su corazón latir con una sonrisa olvidándome por un momento de lo de Laura.

(...)