Este capítulo tiene contenido sensible
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Utilizaron a Solar y su incomparable encanto para acceder al puerto privado en el río Delaware, donde su padre guardaba el yate. Convenció a uno de los capitanes para que les permitieran tomar un pequeño bote para dar un "alegre paseo" y en menos de una hora habían zarpado Delaware abajo hacia aguas abiertas.
Cuando la noche cayó, habían llegado a las coordenadas que les habían dado.
Anclaron, flotando en el agua picada, y esperaron.
SeokJin y los demás les dieron las gracias a SeHun y Solar por su ayuda y luego fueron a la cabina del piloto para que Jungkook se despidiera. SeokJin miró por la ventana mientras abrazaba a Solar. Ella se llevó la mano a su vientre en un gesto que SeokJin sabía que significaba que Jungkook le estaba diciendo que estaba feliz por ellos. Los labios de SeokJin se torcieron en una sonrisa. Le gustaba Solar, y no podía esperar a escuchar sobre su reunión con la familia de SeHun y Jungkook. Aunque también le ponía triste, él no sería presentado a la familia de Jungkook de la misma manera que ella a corto plazo.
Jungkook le dio SeHun un fuerte abrazo, sosteniéndolo más tiempo que de costumbre mientras hablaba con él. Luego le entregó a SeHun lo último de su dinero en efectivo, SeokJin sabía que le estaba diciendo a su hermano que saliera de la ciudad unos días y no utilizara sus tarjetas de crédito.
SeokJin tuvo que luchar contra los nervios. Tenía que creer que los agentes de la CIA que les perseguían no harían daño a nadie a menos que estuvieran en el camino de Kang TaeHyung. SeHun estaría bien. Esperaba.
Un faro de luz en el agua le llamó la atención, y miró hacia la noche sin luna.
—Jungkook —llamó cuando un tipo completamente diferente de nerviosismo se apoderó de él—. Él está aquí.
Cuando Jungkook había mencionado el nombre de O'Flaherty NamJoon, diciendo que su viejo amigo Recon tenía un barco que podían utilizar, SeokJin había esperado algún tipo de bote. Había imaginado que NamJoon vivía en algún apartamento de mala muerte sobre un pub irlandés en el sur de Boston. Esa era la impresión que había recibido del viejo amigo de Jungkook cuando estaba ciego y sólo podía oírle hablar. Así que se sorprendió cuando un elegante yate Outer Reef 580 de dieciocho metros se deslizó a la vista de las luces de situación del pequeño barco.
TaeHyung silbó desde la barandilla donde estaba viendo el yate.
—No es barato. Pensé que habías dicho que tu amigo era policía.
—Lo es —dijo Jungkook mientras revisaba su arma.
—¿Acepta sobornos?
Jungkook levantó la vista para mirarlo. No contestó, sino que se dirigió hacia la popa del barco para llamar a NamJoon y ayudarle a asegurar la pasarela que usarían para cambiar de barco.
SeokJin estaba frunciendo el ceño mientras observaba a Jungkook y a la figura en sombras del otro barco. TaeHyung tenía razón; esa no era una forma barata para vivir. SeokJin se preguntó cómo se lo permitía NamJoon.
Respiró para tranquilizarse y luego puso los ojos en blanco. No debería estar nervioso. NamJoon sabía quién era él, incluso si SeokJin nunca había puesto los ojos en él. Vio como Jungkook hablaba con el hombre, capaz de escucharlos en la noche tranquila.
—Déjame adivinar –dijo el acento de Boston de NamJoon divertido—. ¿Bailarinas?
—Sí, déjanos para que podamos robarte tu reloj por la mañana —murmuró Jungkook. El sentido del humor explicaba por qué este hombre y Jungkook se habían vuelto tan buenos amigos, pero también hacía que SeokJin quisiera odiarlo un poco más.
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Armados&Peligrosos || #5
RandomSolo en la ciudad de Baltimore, tras la espantada de su amante, el agente federal Kim SeokJin descarga su frustración sobre todo el que se cruza en su camino hasta que recibe la orden de viajar a Chicago para unirse a un agente secreto. Una vez allí...