Aclaración:
Este capítulo extra pertencia al patreon en donde recibiamos donaciones con anterioridad. Actualmente se encuentra desabilitado. No es capñitulo necesario para entender el resto de la cronología de la historia.
Era un día soleado y bonito cuando Athanasia se dispuso a hacer un pequeño paseo por su jardín de rosas. Desde la mañana había oído a su hermana mayor y a Lucas hablar de forma incesante sobre un par de plumas perdidas, pero ella no les prestó atención porque honestamente estaba harta de la forma en la que esos dos se llevaban.
Incluso la extraña relación de admiración-desagrado que Jennette y Lucas se tenían era mucho más amena de ver que el constante tira y afloja de Taña y Lucas, aunque Athanasia conocía más que nadie que el desagrado de Lucas hacía Jennette era fingido. Muchas veces lo había atrapado sonriendo al ver a Jennette pasear tranquilamente por los jardines, o al oírle decir una tontería.
Él le tenía cariño, era indudable.
Alejando esos pensamientos de ella, paseó con tranquilidad por los jardines, observando las rosas florecer cada día más con mayor belleza. Él día en que su padre le regaló ese hermoso jardín nunca pensó amarlo tanto, ella solo había sonreído y fingido una complacencia desmedida. En ese momento, la complacencia no era fingida.
Ah, como pasaba el tiempo.
Un día ella era una bebé reencarnada con serias preocupaciones de llegar con vida a los dieciocho, al otro una hermana que nunca conoció en la novela la rescataba de su triste final y al siguiente todos estaban realmente felices viviendo juntos y en armonía.
Claro, aun estaba Anastasio y su insana obsesión por hacerles daño pero Athanasia prefería no hundirse en pensamientos tan oscuros a tan temprana hora. Por eso, tatareó y decidió no prestarle atención a las sombras de su familia para concentrarse mejor en el lindo día que tenía por delante. Sin Tatiana, suponía que todo sería distinto para ella y Jennette, pero ahora que Tatiana había sobrevivido a su funesto destino como ella estaba sobreviviendo al suyo, todas podían estar tranquilas.
Mientras caminaba, algo la hizo parar. No más que un ligero movimiento entre los matorrales. Athanasia miró en la dirección del ruido, ciertamente extrañada.
¿Acaso Blackie y Toffee se habían escapado de nuevo?
Acercándose, se dio cuenta que no.
Aquello que se movía con tal ligereza era una larga pluma plateada, la misma se paseaba con vida propia a través de los matorrales. De repente, Athy recordó las plumas de la cuales su hermana y Lucas estaban hablando antes de escapar a los jardines. Al parecer, Lucas había dejado abierta una arqueta mágica con plumas para viajar entre el espacio-tiempo.
Conociendo la importancia de esas plumas, Athy se dispuso a tomarla para llevarla de vuelta con Lucas. Tarde recordó la siniestra advertencia de su hermana "¡No toques las plumas con la mano desnuda! ¡Por que están impregnadas con magia de una piedra dimensional y podrían enviarlas a otra dimensión!"
Oh, oh.
Ya era tarde, Athy ya la había tomado.
Entonces sonó un "¡Plof!" y ya no estaba en los jardines de rosas que su padre le había regalado.
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¿Quién me convirtió en la hermana mayor de las princesas?
FanfictionObsesionada con la historia de "Who made me a princess?" Sarah se encuentra con un insatisfactorio final feliz en el que, técnicamente, no todos terminan felices. ¿Por qué Jennette sólo se vuelve una inútil antagonista? ¡Eso no es justo! ¡Ambas s...