¿Quién me convirtió en la hermana mayor de las princesas?

Capítulo 30: El cuidado de las plantas es fundamental.

—Buenos días, Sir Lucas mago de la torre negra—Tatiana saludó, Lucas, que esperaba darle un gran susto apareciendo sin previo aviso, bufó.

—No eres divertida.

—¿No lo soy?—Tatiana se sonrió, en sus manos una bandeja de su invención de esa tarde, trufas de chocolate y café helado—, ven, toma la merienda, o mejor ¿el desayuno? ¿Desde cuándo no comes?—Tatiana se alarmó, hacía dos días que Lucas había llegado al palacio Esmeralda y en ninguno de esos días veía alguna comida además de la ligera merienda que compartieron la tarde de su encuentro.

Lo que rellenaba todo el espacio entre esas dos tardes era a Lucas haciéndose cargo de su nuevo puesto como mago Imperial, regañando al resto de magos o experimentando en su laboratorio.

—Deja de ver en mi estomago—él rechistó, obviamente irritado en ser descubierto, aún así tomó una trufa cuando Tatiana le acercó la bandeja—Hoy estuve con las Princesas—confesó, luego de tragar, tomó otra trufa sin mirar atrás—, he podido observar más a la quime-

Tatiana puso aquella expresión en su rostro que lo hizo parar. Él bufó, fastidiado e intentó corregirse: —a la que llaman Princesa Jennette—cada palabra plagada de hastió. Aunque no era lo mejor,  era un comienzo, así que Tatiana lo dejo proseguir—. Cuando la vi por primera vez, pensé que ni siquiera existía. Pero ahora que he detallado su mana, sólo la magia convencional podría describirla como un algo y no un cómo.

—¿Entonces, no es una quimera?—Tatiana saltó.

—¿Siquiera sabes lo que es una quimera?—Lucas elevó una ceja, tomando su té helado. ¿Cómo podía lucir tan serio con aquella apariencia de niño?

Tatiana meditó un poco sobre el significado y se encontró con que no sabía nada más allá del significado que había aprendido en la novela.

—Mmmm... ¿No?

Feliz de encontrar algo qué restregarle a Tatiana, él esbozó una gran sonrisa burlona.

—Una quimera es un ser constituido por partes de distintas formas, un sueño, algo propio de una utopía. Cuando habló de tu hermanita como una quimera, quiero decir que ella tiene un mana hecho de magia blanca y magia negra. Eso, en esencia, es imposible. La magia negra está hecha para hacer daño, va en contra de la naturaleza, por ello nadie puede nacer con un mana de magia negra, ella, sin embargo, es la unión de un imposible. Hasta hoy, pensé que nada como eso, podría tener alma, pero ella existe, siente, piensa y tiene esencia. Nunca vi nada igual.

Lucas parecía tan serio al decirlo, ojos rojos brillantes y suspicaces.

—Eso, ¿es malo?—se acongojó.

—No del todo, sólo significa que no podre quitar la parte de su mana que tiene mana de magia negra—él resolvió, llevándose otra trufa a la boca.

—¿Qué? ¿Por qué no? ¡Dijiste que podrías ayudarme!—Tatiana se exaltó. ¡No podía simplemente echar a Jennette a un lado! ¡Así no era como la familia funcionaba!

Usando la mayor parte de su paciencia, Lucas soltó un bufido y se dispuso a explicar:

—Imagina que esta trufa es tu hermana—él tomó una pequeña trufa hecha de chocolate negro y blanco—, la parte blanca, es la magia blanca. Buena, útil para todos. La parte negra, es la magia negra. Útil sólo para ella y, en esencia, la que la maldice con mala suerte y  infortunio. Es la parte que tú has estado conteniendo todos estos años—Lucas puso ambos dedos en cada parte de la trufa y la separó, pequeños pedazos se agrietaron y, al final, no quedó más que migajas. Tatiana abrió los ojos, horrorizada ante la visión—, esto es lo que pasaría si intento dividir su mana. Además de ser complejo y no tener suficiente fuerza como para hacerlo, la dejaría sin un alma en el proceso, sólo un cascaron vació, otra opción sería sellarla o...