✧13✧

800 56 0
                                    





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

*

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

*.✧Emma.

En cuanto escuché que la conversación que estaba teniendo con mi madre se desvió por completo del tema de Lucas y comenzó a hablar sobre el conseguir un buen esposo y padre para mi hijo supe que tenía que salir de ahí inmediatamente.

No era la primera vez que surgía está conversación y no solo con ella, si no también con mi papá y cada vez que este tema surgía terminaba saliendo de la casa hechando humo por la boca, las orejas y hasta la nariz. Así que simplemente está vez antes de llegar a ese extremo detuve a mi madre en cuanto comenzó a parlotear como un loro.

—Te juro que si sigues, me llevo a Lucas —le amenace para que guardara silencio. —Y no estoy jugando mamá.

—¡¿Pero en verdad te atreverías?! —dramatizo llevando una mano a su pecho dolida.

—Si y ya me voy —tome mi bolso. —Te veo más tarde, por favor llámame si sucede algo con Lucas.

—Como digas hija mía —solto de mala gana.

Salí de la casa inflando las mejillas y dando bocanadas de aire, gruñendo y pisando mis tacones sobre el suelo hasta casi hacer un hoyo en el concreto con ellos. Pensé que aquel mal humor se iría pero solo empeoró cuando llegue a la alcaldía y me di cuenta de que alguien había mezclado las chequeras de impuestos del ayuntamiento con las de el resto de negocios de comida que yo me había encargado de ordenar alfabéticamente hace una semana para archivarlos y enviarlos al sistema de Boston.

Cuando entre a la oficina de Jungkook lo encontré fumando un cigarrillo de pie, mientras escuchaba el golpeteo de sus zapatos contra el suelo, estaba regalando a una de las secretarias que deje a cargo antes de irme a comer con Lucas.

—¡¿Cómo que no pudiste hacer la reservación?!, ¡Te especifique que en ese hotel!.

—Señor lo siento yo.... —la chica miraba el suelo apenada, entonces supe que tal vez era el momento de librarla de aquella tortura.

—Esta bien, está bien —llame la atención de ambos. —Por favor vuelve a tu lugar de trabajo, yo me encargare de hacer la reservación para Boston —le sonreí a la chica para tranquilizarla, ella me dio un leve asentimiento con la cabeza y salió de la oficina tan rápido como pudo.

LOVE AND ITS  PROBLEMS    |J.J.K|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora