LOVE AND ITS PROBLEMS |J.J.K|

✧Epílogo✧

4 años más tarde.

Emma*.｡.:*✧

—¡Mamá Lucas me hizo una trenza más baja que la otra!.

Deje la enorme cuchara con la que terminaba de mezclar el kimchi sobre la isla de la cocina, mientras bajaba la temperatura de la estufa y salía de la cocina, me dirigí a la sala en donde los gritos de Sunhee no cesaban, Lucas se encontraba sentado en el sofá con un cepillo en una mano y en la otra un fijador de cabello.

El cabello negro de Sunhee y sus ojos de ciervo idénticos a los de su padre, se encontraban llenos de enojo, arrugo la nariz cuando me acerque a ellos riendo en voz baja.

—Intente hacer lo mejor que pude mamá —se defendio el mayor. —Pero su cabello es muy lacio y no deja de moverse.

—¡Yo te dije que no quería trenzas! —mi pequeña bebé comenzó a señalarlo con el dedo.

—Los dos saben que no deben de....

—¡Amor estoy en casa! —el grito de Jungkook hizo que los dos se levantarán como un rayo del sofá, salvándose de mi regaño.

El pelinegro de ahora cabello un poco largo entro en la sala con ambos niños en brazos, todavía no podía entender cómo es que podía cargarlos a los dos. Teniendo en cuenta que Lucas con casi once años no pesaba lo mismo que cuando tenía seis. Y Sunhee a pesar de tener cuatro, era una niña algo grande y regordeta.
Jungkook estaba sudado de todas partes, llevaba puesto unos pantalones deportivos verdes, una playera gigante y sus tenis de boxeo, desde que nos habíamos mudado a Corea, las clases de boxeo sustituyeron el gimnasio.

—Papá a Sunhee no le ha gustado la trenza que le hice —me cruce de brazos escuchando de nuevo el tema. —Mamá estaba por regalarnos cuando llegaste.

—¿No le han gustado?, Si son muy bonitas —respondio mi esposo poniendo a los dos en el suelo.
—Dejemos las trenzas de un lado, ¿Podrían ir por un short y una toalla para papá?, Quiero un baño en la piscina —les pidió a ambos niños, Sunhee dió un beso en la mejilla de su padre antes de despedirse e irse corriendo detrás de Lucas.

Luego Jungkook camino hacia mí y por fin plantó un beso en mis labios y otro en mi barriga que apenas comenzaba a notarse. Casi cuatro meses de embarazo y mi estómago no era tan prominente ni el embarazo tan evidente como lo fue el de Sunhee días después del incidente de Jungkook y SeokJin.

Pues tan solo una semana después de que ese año Jungkook fue dado de alta, recuperado del disparo, los síntomas se hicieron presentes y descubrimos que llevaba dos meses de embarazo encima, eso en parte fue el plus para que ambos decidieramos mudarnos a corea lo antes posible.

Los padres de Jungkook aún vivían en Estados Unidos, no Foxborough, ahora vivían en una mansión a las afueras de Boston, que solíamos visitar una vez al año por un par de días o a veces ellos venían aquí.

Ese mismo año SeokJin entro a rehabilitación con ayuda de su familia, meses después pudo salir del hospital y dedicarse a lo que siempre fue su sueño. Ya no solo era modelo de marcas estadounidenses, también trabajaba para marcas prestigiosas y tenía un contrato fijo con Louis Vuitton, que lo mantenía la mayoría del año ocupado, pero en sus vacaciones solía venir a Corea para pasar días a lado de Lucas.

Jessi se había quedado en Foxborough, ahora estaba casada con un hombre local de ahí, se conocieron relativamente rápido y luego de pensar que jamás encontraría el amor de nuevo, lo hizo, nos visitaba de vez en cuando, cuando el trabajo la dejaba.

Los otros cinco chicos, que se habían convertido en mi familia también, vivían aquí en Corea, aunque Jimin seguía viajando mucho debido a su trabajo en la política era a quien menos veíamos de los cinco.