El baile había empezado hace poco tiempo, todos se divertían, y parecía haber más personas que en el primer día. Las cumpleañeras lucían visiblemente bien para todos, algo que sorprendió un poco a Adam ya que hace unas horas estaban enojadas la una con la otra.
Mylady por primera vez, estaba en el baile, con un sujeto junto a ella todo el tiempo, extraño para algunos, pero prefirieron ignorarlo, y continuar en la fiesta con normalidad. Denise y Anastasia bailaban una junta a la otra ignorando completamente el hecho de que ambas tenían pareja para ese día, algo que a Adam no le molesto mucho, ya que casi siempre le sucedía cuando su esposa y cuñada celebraban su cumpleaños juntas.
Adam en cambio bailaba con su pequeña hija, con tranquilidad, y haciendo pequeños chistes y bromas sobre la manera de bailar de otros.
-Mencionaste que tenías una cita en el almuerzo- Dijo la pelirroja mientras bailaba junto a su hermana.
-Sip, pero a juzgar por la hora creo que me dejo plantada- Observo el reloj de péndulo en la habitacion y suspiro- Fui muy rara, al invitarlo...-Añadió frustrada.
-Hey, vamos no es tan grave- Tomo sus hombros- Él se lo pierde. ¿De acuerdo?.
-De acuerdo- Sonrió y rieron para luego continuar bailando como si nada.
-Niñas...-La voz de su madre las obligo a parar y girar encontrándose con ella junto a un hombre que le doblaba la estatura con un traje negro muy elegante- Él es Darius Louis. Un príncipe.
-¿Príncipe?- Cuestionaron ambas ligeramente sorprendidas y se miraron alarmadas para luego mirarlo.
-¿Debemos hacer una reverencia? ¿No?- Cuestiono la pelirroja.
-Creo que debemos hacerla....-
-No, está bien- Aseguro el hombre con tranquilidad para luego dedicarles una sonrisa encantadora- Mylady, dijiste que tenías dos hijas inteligentes, pero jamás mencionaste que eran mujeres preciosas.
Ambas sonrieron amablemente con una ligera risa, Denise lo observo fijamente a los ojos, rebuscando en ese color verde. Sabía que lo había visto antes, pero no recordaba donde.
-El príncipe Darius, es soltero al igual que Denise. ¿Por qué no bailan?- Le ofreció su madre ganándose una risa ligeramente nerviosa de la castaña.
-Solo si, madame está dispuesta- Sus ojos verdes se fijaron directamente en la castaña, perdiéndose en ese color chocolate por unos segundos.
-De acuerdo- Dijo Denise, ya que no era tan descortés como para rechazar a un príncipe.
Darius tomo su mano, y la guio hacia otro lugar, para luego tomar su cintura y bailar al compás de la música durante varios segundos en un silencio algo incómodo.
Denise se sentía un tanto incomoda, muy incómoda, de hecho, el príncipe no paraba de mirarla como si fuera el ultimo moffin de la pastelería, era incómodo.
-Tu madre menciono cosas buenas de ti, dijo que eras muy lista-
-Lo soy, majestad-
-Por favor, dime Darius-
-Darius, de acuerdo- Acepto con tranquilidad-¿Cómo conociste a mi madre?. Digo, sé que Axel era amigo de medio mundo y en especial de la realeza, pero no creo que mi madre se allá ganado el cariño de muchos.
-De hecho, nos conocemos desde hace años. Incluso desde antes que Axel y ella contrajeran matrimonió, también conocí a su primera esposa- Aprovecho el ambiente tranquilo entre ellos, para girarla y hacerla volver a sus brazos- Axel era amigo cercano de mis padres.
ESTÁS LEYENDO
La Vida Es Un Cuento de Hadas
FantasyEmma Blanc vivió el cuento de la Cenicienta en carne propia, su madre murió de bebé, su padre se volvió a casar con una mujer mala con dos hijas que para mucha casualidad también eran gemelas, luego murió; Pero vivió la versión de Cenicienta en la q...