Secret || MoonSun

𝐀 𝐓𝐮 𝐒𝐮𝐞𝐫𝐭𝐞

Habían pasado dos días, y consigo que la semana casi terminará. Era miércoles en la mañana, específicamente, a la hora donde YongSun se tenía que alistar para ir al colegio.

Sorpresivamente los días anteriores habían sido los más calmados que YongSun había experimentado desde que hace unos meses piso aquel colegio religioso.

En su casa todo estaba corriendo de maravilla, tanto que hasta parecía extraño. Su madre se la pasaba afuera de la casa junto con su papá, y ella se quedaba a cargo de su tía, que en algunas ocasiones, tenía que dejarla sola por poco tiempo por asuntos que nunca le decía, aunque siempre llegaba feliz.

Y aunque había escuchado que su madre no estaba contenta de que se quedara con Taeyeon, no hubo algo para que eso no sucediera.

Cada vez faltaba menos para que YongSun se volviera a encontrar con Wheein, pero por lo mientras, iba haciendo anécdotas sobre lo que pasaba en el consejo o en el colegio.

En cuando al tema de Eric, YongSun ya no quiso tocar el tema y tampoco había tenido la desdicha de cruzarse con él

Era como si simplemente hubiera desaparecido en el aire.

Claramente le había contando con poco detalle lo sucedido a su amiga, que aunque fuera poco, sentía pena porque la primera "relación" de YongSun terminaba así.

— Quiero que sea lunes para que regreses.— Le dijo YongSun mientras caminaba por la banqueta rumbo al colegio.

— Ves como no soy tan insoportable.

— Eres insoportable.

— Extrañas a esta insoportable.— Le dijo con orgullo.— Admitelo.

— Si es lo que quieres oír, olvídalo.— Contestó YongSun en risas.— Reza para que se te cumplan el milagro de oírme decir que te extraño.

— Rezaré todo lo que sea necesario.

Ellas eran así, y siempre ocurría algún momento donde se podría decir que su fé era un juego de palabras y ponían en discordancia lo que fuera "la voluntad de Dios"

— ¿Todavía no llegas?— Preguntó Wheein al ver que faltaban diez minutos para las siete y media.

— Llevo parada en el mismo lugar diez minutos.— Admitió YongSun.— Todavía teníamos muchas cosas que hablar.

— Wow, que consideración.— De verdad lo había tomado como un gesto muy lindo.— Debes ir ya, ¿No? Se te hará tarde.

— Creo que sí.— YongSun se asomo a la calle que seguía para ver si veía algún rostro conocido.— Igual, tendrás mi reporte a la salida.

— Eso espero.— Se conformó.— Suerte en tu día, yo seguiré durmiendo.

— Gracias.— Fue lo último que dijo para cortar la llamada.

YongSun comenzó a caminar directamente hacia la puerta de la entrada, de no haber sido detenida porque fue sujetada del brazo.

Parecía que ya era un costumbre.

— No me has hablado.

Eric estaba de nuevo ahí, cómo siempre hacia para llamar su atención, solo que ahora lucia más enojado, más histérico, menos él.

Toda la fachada de niño bueno se había ido acabando con el tiempo, y esto solo demostraba que la última pizca de todo había sido perdida.

— Dijiste que si me iba se terminaba.— Le recordó queriendo quitar la mano de Eric de su brazo, fallando.— No le veo sentido a...