Born again

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Eddie tocaba para su banda, la melodía, el ritmo acorde a los movimientos de dedos y pies les pertenecían a los presentes en la pequeña sala que usaban como estudio. Sus dedos recorrían la esbelta y majestuosa guitarra, creando nuevos acordes para su estilo, explorando nuevos mundos, los chicos a su lado lo escuchaban. Gareth escuchaba detrás de la batería, moviendo las baquetas en el aire. Jeff daba leves golpes con sus dedos a su guitarra. Louis estaba sentado y en sus piernas descansaba su bajo eléctrico nuevo. Al terminar de hacer su pequeña presentación, Eddie suspiró y alzó la vista hacia sus amigos.

- ¿Y bien? – Preguntó ilusionado, era una melodía que se le había quedado pegada en la cabeza las últimas semanas, la noche anterior se había empeñado en traspasarla a guitarra. Y había costado trabajo, apenas había dormido unas dos horas.

- Está increíble. – Jeff tomó la palabra, aplaudiendo, lo siguieron los demás, Eddie festejó alzando ambos brazos al aire y cayendo rendido en el sofá. – Gareth, ¿lo tienes?

- Se me quedó esto.

El chico se concentró en su instrumento, recordando lo escuchado. Tocó un poco, casi nada, pero acertando en algunos movimientos. Louis rió en burla.

- Hombre, podemos trabajar en ello. – Dijo Eddie con las manos en su rostro, se reincorporó sentándose en el sofá. – A mí me costó encontrar los acordes perfectos.

- Claro. – Gareth se paró de la silla, recogiendo su chaqueta tirada en el suelo y poniéndosela. – Debo irme.

- Oh, ¿la niña tiene que llegar a casa antes que oscurezca? – Se burló Louis conectando el bajo al amplificador. Gareth le levantó el dedo de en medio.

- Nos vemos mañana, chicos. – Se despidió chocando los puños con Eddie y Jeff, el otro fue ignorado, pero poco importó.

- Ha estado menos tiempo con nosotros. – Dijo Eddie una vez que el otro chico se fue.

- Quizá tiene novia.

- ¿Novia? – Nuevamente se burló Louis. – Ese tipo es un marica de pies a cabeza.

- Amigo, creo que tú eres el marica buscando a Gareth todo el rato. – Molestó Jeff, formando una discusión en ambos, algo que pasaba usualmente.

Eddie los miraba, pensando en a qué se debería el estado actual de su amigo. Ha faltado a varias partidas del club, en los recesos es complicado pillarse y falla en las prácticas. Claramente sucedía algo.

Las risas escandalosas y los insultos que frenarían el corazón a más de una anciana cesaron al escuchar un fuerte ruido. Eddie había tirado todo lo de encima de la mesa, subiéndose en ella y apuntando con su dedo a ambos chicos.

- Idiotas, tenemos una presentación importante en menos de tres semanas y necesitamos un puto vocalista.

- Pero en las audiciones...

- ¡Lo sé! Ninguno es merecedor, todos son pésimos, pero debemos seguir con la búsqueda si no queremos quedar fuera. Y, además, necesitamos saber qué sucede con nuestro baterista estrella. O a este paso seremos dos guitarras y un jodido bajo, seriamos la gran burla.

- El aviso ya está puesto en los diarios, nadie que no conozcas ha llamado.

- ¡Más publicidad! ¡Más!

- ¿Qué tal si le pides a Dustin que se encargue de ello? Ese niño conoce a todo Hawkins. – Tomó la palabra Louis, Eddie apretó los labios al escuchar eso. Era un buen plan, claro que lo era.

- Bien, le diré. Ustedes encárguense de que Gareth no nos falle.

Dicho eso, Eddie saltó de la mesa, tomó su guitarra y la guardó. La agarró de la pequeña manilla en un lateral.

CORRODED TEETH [STEDDIE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora