CORRODED TEETH [STEDDIE]

Nevermind

Ambos estaban sentados en el suelo, Eddie tocaba algunas canciones que Steve no conocía, pero no le desagradaban en lo absoluto.

- Vamos, intenta de nuevo.

Eddie suspiró, mirando al techo.

- Estoy cansado... - Murmuró.

Steve estiró sus brazos hacia arriba, acomodando su postura. Miró un segundo al chico y luego desvió su mirada.

- Ya es tarde. - Harrington comprobó la hora en el reloj de su muñeca. Eran cercanas las diez de la noche. - Debería irme.

- ¿Te vas?

- Sí, mañana tengo que trabajar.

- Ugh, mierda, ¿tú siempre trabajas?

Steve se paró, sacudiéndose un poco y colocando su chaqueta. Eddie lo miraba hacia arriba, dejó la guitarra a un lado.

- Los domingos no trabajo.

- Wow.

- Bueno, adiós, Munson.

Antes de que pudiera siquiera dar un paso, el nombrado lo agarró veloz de la muñeca.

- ¿Qué pasa? - Preguntó.

- Uh, yo, Steve... - Miró al suelo, sin soltar al otro. - Me gustaría que... uh... practicar más contigo.

Silencio.

- Si quieres, es sólo que... me gustas como compañero, y, bueno, ya sabes... compartimos un pasatiempo y eso es, uh, cool.

Eddie alzó la vista, apretando nervioso sus labios. Steve lo miraba confundido, se alejó.

- No veo porque no. - Sus pasos marcaron hasta la puerta, abriéndola. - Nos vemos, amigo.

Eddie se despidió con la mano alzada en el aire.

- Chao.

Escuchó la puerta principal cerrarse y se tiró al suelo. Golpeó levemente su cabeza, su cabello cayó desordenado. La guitarra a su lado era su única compañía ahora.

Giró su cabeza.

Tenía algo pendiente.

Steve conducía a casa, escuchando música en un volumen bajo, el ruido de la carretera lo opacaba por completo. El chico no prestaba atención a la canción, tomaba con una mano el volante, la calle era recta.

Últimamente Eddie se estaba adueñando de sus ratos libres.

Pero no se sentía enojado, ni triste.

Estaba feliz.

Le gustaba la amistad que estaba formando con Munson, se sentía cómodo y además, había aprendido algo nuevo.

Porque Eddie se tomó el tiempo de explicarle algunas cosas de las guitarras eléctricas, y de los reyes de ésta.

Sonrió por última vez ante el recuerdo, ya estaba llegando a casa.

Cada vez faltaba menos para la presentación.

Dustin buscaba con la mirada a Eddie, confundió su cabellera más de una vez con algunos chicos y...chicas.

Era el segundo receso, Mike iba junto a él.

- ¿Por qué lo buscas tan desesperado? Quedamos en jugar después de clases.

- Necesito decirle que no funcionará. Debemos buscar un vocalista fuera del pueblo, a este paso serán una banda instrumental.

- ¿Eso es malo?