Guía de monstruos y criaturas fantásticas

Monstruos de Arica

Al norte de Chile, en la carretera desértica que conduce a la ciudad de Arica se presentaron extraños avistamientos donde los testigos aseguran haber visto animales fantásticos que se parecían a enormes canguros, a dinosaurios, incluso llegaron a describirlos como gárgolas que les causaron pánico mientras viajaban de noche.
Los testigos temieron dar su testimonio por miedo a las burlas y a ser ridiculizados, pero lo que ellos vieron no se parecían en nada a algún animal que hubieran visto antes, a continuación podrás leer lo que dijeron a la prensa en aquel entonces:

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Solo atiné a frenar mientras por delante pasaba una tremenda bestia, muy similar a un dinosaurio de dos patas, con tremendos muslos.

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-Hernán Cuevas, militar del ejército chileno.

Estas son las palabras que dijo el suboficial Carlos Abett de la Torre, quien asegura haberse topado con las mismas criaturas en la misma carretera cuando viajaba con su familia después de que Hernán Cuevas diera su testimonio:

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De pronto todo se oscureció, luego miré por el vidrio (parabrisas) y se vieron unas cosas que eran como pájaros con cabeza de perro y con las alas hacia atrás, eran como gárgolas.

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Las características de estos seres me hicieron recordar a los dromeosáuridos, una familia de dinosaurios a los que pertenecen especies como el Velociraptor Mongoliensis, el Utahraptor, el Deinonychus, el Achillobator, entre otros. Además que los testigos afirmaron que las criaturas que vieron tenían plumas.
Decidí replicar el viaje que los diferentes testigos realizaron en el ya lejano 2004, durante la mayor parte del trayecto no vi nada raro o inusual en el ambiente desértico, todo estaba tranquilo. Viajé durante varias horas hasta que el sol comenzó a ocultarse, entonces pensé en todo lo que había hecho hasta ese entonces, pensé en lo orgullosos que estarían mi mamá, Edward, Frederick y especialmente, Audrey. Pero, ¿Cómo reaccionaría el resto de la comunidad científica cuando publicara todas mis investigaciones? ¿Me verían como el Darwin de los animales desconocidos o me tirarían de loco?
Ya entrada la noche encendí las luces para alumbrar el camino y empecé a sentir frío al mismo tiempo que sentí un escalofrío como si una serpiente se deslizara por mi espalda. Me mantuve alerta durante mucho rato pero no vi nada por lo que decidí detener el auto para estirar las piernas un poco.
De pronto escuché un extraño ruido similar al ulular de un búho, sin embargo, se escuchó como algo más grande. Atemorizado, me volví a subir al auto con el corazón latiéndome a mil por hora, y para mi susto, uno de estos seres saltó sobre el cofre y los huesos se me congelaron del susto.
El animal me miró con curiosidad, medía cerca de 2 metros de alto, 1 metro que iba desde la cabeza a la punta de la cola, sus brazos poseían 3 dedos con garras y plumas a los lados, tenía plumas grises con puntos negros, sus mandíbulas tenían dientes afilados curvados hacia atrás, pero lo más memorable de este monstruo del desierto era una garra retráctil en forma de hoz de 15 centímetros que tenía en sus 2 patas traseras muy características de los raptores.
Arranqué a toda velocidad en completo terror ya que el animal comenzó a golpear el parabrisas, llegué a los 90 km/hora. Cuando miré por el retrovisor vi con asombro que 4 de estos seres estaban persiguiéndome y a pesar de la velocidad a la que huía, estos corrían al lado del vehículo como si nada.
Con el temor invadiendo mi cuerpo y la adrenalina a tope, frené repentinamente y los monstruos de Arica se estrellaron contra mi auto, quedando inconscientes. Sin pensarlo 2 veces aceleré y dejé atrás a los depredadores apex del desierto chileno.