Aquellos días se habían vuelto semanas y esas semanas en mes. No había hablado para nada con Axozer, a veces le veía en stream y hacíamos videollamada pero no era lo mismo.
Suspire tratando de dar mi mejor sonrisa falsa ante la cámara pues estaba apunto de prender stream. Eso hasta que mi estómago se revolvió demasiado.
Salí corriendo para ir al baño más cercano, en algunas ocasiones odiaba la casa de Raúl. Al final terminé bajando rápido las escaleras para ir al baño que había en el salón.
Al llegar deje salir todo lo que tenía en mi estómago, me quedé apoyada en el inodoro sin fuerzas para levantarme.
Como pude cogí mi móvil para marcarle a Sara quien seguramente estaba en stream.
—¿En qué momento saliste? Que te acabo de oír correr.
—Estoy en el baño del salón... Necesito ayuda, me siento fatal.
—Yendo.
Oí sus pasos apresurados bajar la gran cantidad de escaleras que tenía el lugar, le di una pequeña sonrisa al ver cómo la puerta se abría. La rubia me miró preocupada pero aún así me ayudó a levantarme.
Cómo pudo me guío hasta mi habitación, me dejó una pastilla y se fue a terminar su directo.
Iba a tomar una siesta pero mi móvil comenzó a llenarse de notificaciones, algo extrañada mire el celular entrando a Twitter pues de ahí venía la gran cantidad de notificaciones. Entre a una cuenta la cual su única publicación era un hilo de como Axozer me había sido infiel.
_____play_fans
@Axozer te hemos pillado.
Que ese no era el atuendo que tenían en la velada del año? 🤔Que no estabas de visita con tus padres? 🤔
Parece que el niño prodigio salió con sorpresas... Hay más videos de la velada.
¿Por qué lo relacionaban conmigo si nunca lo hicimos público?
Mi estómago se revolvió nuevamente causando que está vez subiera a la habitación de la pareja y entrara a su baño, cerré mis ojos al escuchar que Raúl venía hacia aquí.
—Dadme un momento chat, voy a mear.
Como pude me puse de pie fingiendo que buscaba unas cosas.
—¿Has vomitado?—negué sin mirarle—Si te he escuchado, niña.
—Tal vez fue tu idea, vuelve a tu stream. Solo buscaba unas cosas—este asintió no muy convencido, antes de que se fuera le hable—¡Espera! Iré a ver a Axozer. Regreso hoy mismo.
—Vale, ten cuidado. Ya sabes dónde están las llaves.
Necesitaba respuestas y ya.
Me adentre al auto para comenzar a manejar hacia mi destino, me encontraba demasiado nerviosa. No le veía en semanas y vaya lío en el que estamos.
Baje del auto sumamente nerviosa, al reconocer la casa toque la puerta siendo recibida por una mujer algo mayor.
—Hola...¿Se encuentra Alejandro?
—Esta trabajando, ¿Tu eres...?
—_________ Álvarez.
—Nos hablo de ti, pasa. Esta en su habitación—asentí caminando hacia donde me indico, abrí despacio la puerta para verlo en directo. Joder.
—Tu y yo sabemos que paso, no dejaré que arruines mi noviazgo por ser mala perdedora... Joder, Gemita. Vete a la mierda.
—¿Axo?
Este pego un gran brinco que casi cae de la silla, cerré la puerta al entrar a la habitación. Me acerque a este el cual me recibió en un abrazo.
—Necesitamos hablar.
—Lo se...
—Ahora todo cuadra, ¿Sabes?—murmuré haciendo que me mirara confundido—Que desaparecieras mágicamente del after party de la velada, que bebieras mucho y me trataras raro...
—Se por donde vas y créeme que las cosas no pasaron así—interrumpió levantandose de su silla.
—Lo mejor será que paremos aquí.
—¿Que?
—Escucha, si te follaste a Gemita no importa. No éramos pareja en esos momentos y... Joder—suspire tratando de no llorar—Adiós Alejandro.
—_________, no me has dejado hablar.
—Es que no quiero escucharte, tío.
Salí de la casa rápidamente para subir al auto y emprender camino de vuelta a casa. Mi cabeza estaba hecha un desastre, tal vez debí escucharle pero el enojo me nublo.
Claro que los siguientes días para mí fueron una completa tortura, sumándole que estaba enferma del estómago.
Los vómitos seguían ahí, a tal grado de que Sara y Raúl me creían con problemas alimenticios.
Mire una última vez mi chat para ya despedir stream.
—Vale... Hasta aquí el día de hoy—cerré mis ojos jalando aire pues me sentía algo mareada—Nos vemos otro día, misma hora, mismo canal, besos en la cola.
Me quedé apoyada en mi escritorio buscando las fuerzas para levantarme.
—¡Sara!
—¿Te encuentras bien?—negué sintiendo como me ayudaba a levantarme—Creo que ya se que tienes, espera aquí.
La mire confundida al ver qué se iba corriendo, mi confusión aumento al ver qué regresaba con una prueba de embarazo.
—Pero Sara...
—Rápido, Raúl no está.