Un amor inesperado

Capitulo 5

El chico que me tocó enfrente en el tren, que dije que era monísimo pues era el. Le hice una señal a Amaia diciéndole que si que era él el del tren.
Aitana: Hola Miguel- dijo abrazándolo
Miguel: Hola Aitana
Aitana: Creo que ya nos han presentado
Miguel: La verdad es que si, me suena tu cara.
Aitana: Soy la del tren, la que está enfrente
Miguel: Ah, sabia que me sonabas pero no sabia de que
Cuando dije yo eso le note como poco a poco se ponia cada vez mas rojo.
Mateo: Bueno vamos a la piscina.
Todos íbamos hablando de camino a la piscina.
Mateo: No he tenido la oportunidad de presentarme lo siento.
Natalia: ¿Como te llamas?
Mateo: Soy Mateo, ¿y tú?
Natalia: Yo Natalia
Mateo: Eres muy guapa, ya nos iremos conociendo- dijo mientras le guiñó el ojo.
Natalia: Tu tampoco estas mal- Le dije y me fui a hablar con las chicas
*Natalia corrió hacia nosotras*
Natalia: ¡Mateo me ha giñado el ojo! Es tan guapo
Aitana: Créeme es insoportable
Natalia: ¿Si?
Aitana: De verdad lo y mucho
Llegamos a la piscina y pusimos las toallas en el césped, nos quitamos la ropa y la dejamos en la toalla.
Mateo: Venga, nos tiramos todos de golpe
Aitana: Venga
*Nos tiramos todos de golpe*
Amaia: ¡Que fría!
Cepeda: Si si
Miguel: ¿Y donde està Aitana?
Me comienza a buscar por la piscina cuando yo saco la mano para que me ayudaran. Miguel vino lo más rápido que pudo y me cogió en brazos desde el sitio más fondo de la piscina hasta el bordillo.
Miguel: No te preocupes ya està- dije mientras la llevaba a el bordillo para que se apoyase.
Aitana: Gracias- Le dije mientras tosía
Amaia: ¿Que te a pasando?
Mateo: Nada, solo que es tonta y no sabe nadar
Aitana: Tonto tu imbecil, me he ido muy para el fondo, me he puesto nerviosa y he tragado mucha agua.
Natalia: Menos mal que estas bien
Aitana: Si- dije recuperándome
Después de eso nos quedamos un rato más en la piscina hasta la hora de comer.
*En el comedor*
Amaia: Haber que hay de comer
Aitana: Creo que hay macarrones y Carne
Pasamos todos a por la bandeja y la comida y nos sentamos.
Cepeda: Aitana, ¿puedo hablar contigo?
Aitana: Claro, espera vamos más para allá.
*Le lleve a un rincón de el comedor*