Un amor inesperado

Capitulo 12

Dos semanas después:
Ya llevábamos bastante tiempo en el camping y han pasado bastantes cosas interesantes. Yo con Miguel sigo igual, no somos todavía novios.
Amaia y Alfred están súper felices juntos y me estoy dando cuenta de que Natalia y Mateo cada vez están más juntos pero siguen sin ser nada. Y Ana y Cepeda cada uno va a su royo sin ninguna preocupación de novios ni nada. Ahora mismo vamos rumbo a la playita a jugar a Vóley.
Natalia: ¿Donde están los chicos?
Miguel: Vamos, subir todos al coche
Aitana: Pareces un socorrista
Miguel: *se rie*
Submisos al coche y nos dirigimos a una nueva playa que nunca habíamos ido. Cuando la encontramos había una red grande para poder jugar a Vóley. Nos pusimos a jugar todos juntos, chicos contra chicas. El juego era un poco intentado ya que no lo hacíamos con las reglas de vóley sino que en el primer partido quien llegará hasta cinco ganaba y los capitanes era Miguel y en el otro la capitana era yo. Ganamos las chicas y en la siguiente ronda ganaron los chicos. Como ya se nos hizo tarde nos dio tiempo a ver el atardecer. Se veía precioso con la playa, nos bañamos con el atardecer de fondo, Miguel y Amaia saben la obsesión que tengo con los amaneceres y atardeceres. Nos hicimos un par de fotos y nos fuimos para el camping a cenar, ya que sino mi madre se queja de que no le envío fotos.
*Llegamos al camping*
De camino a nuestras cabañas vi como Natalia y Cepeda se reían y hablaban mucho juntos. Y yo no es por ponerme modo celosa pero no pinta muy bien la cosa, pensaba que a Natalia le gustaba mi hermano. Pero como ella dijo que no pasó nada aquel dia, yo le crei y pienso que ella puedo hacer lo que quiera con su vida, eso si que no le haga daño a mi hermanastro, Estas semanas me estoy acercando mucho más a él porque por muchos que no quiera lo voy a tener que aguantar por mucho tiempo y no es plan de estar amargada todo el día por no aguantarle. A parte el me cuida como si fuera su hermana pequeña, en cierta manera lo soy.
*Llegamos al comedor*
Miguel: Aiti, ven aquí te tengo que decir una cosa
Aitana: Dime
Miguel: Mañana a las 6:45 te espero en la puerta de tu cabaña para ir a ver el amanecer.
Aitana: Joee, te has acordado de que me encanta ver amaneceres.
Miguel: *Sonrie y asienta con la cabeza*
Aitana: Vale, hay estaré
*Vamos con los demás*
Cepeda: Hoy en la cabaña de Alfred y Ana jugamos al uno.
Amaia: Uy pues yo soy malísima- dije riéndome
Aitana: Madre mia- dije poniéndome la mano en mi cabeza
Cuando acabamos de cenar y de hablar un rato nos fuimos a la cabaña de Ana y Alfred, pero como íbamos a jugar afuera, en el pequeño jardín, cogí una sudadera para no tener frío.
Miguel: Me suena esa sudadera
Aitana: Uy creo que es tuya
Miguel: Tu ya te has adueñado de ella
Aitana: La verdad es que si, le estoy empezando a coger cariño y todo.
Ana: Venga reparto las cartas
Jugamos un rato hasta que yo dije que me iba a dormir porque mañana tenía que madrugar.