La Reina De Francia

Capitulo 2:

retrato por @aliceblakeart  en ig.

(Esta es la manera en la que imagino a Vicky)

Querida madre:

Seguimos en camino a Francia, el viaje ha sido complicado y difícil. Descubrimos que Anastasia tiende a marearse mucho y me preocupa su salud; Irina y Teri están aterradas. Viajar en barco es una pesadilla.

Hemos parado en un pequeño puerto para abastecernos de comida. Han decidido también, que aprovecharían para limpiar nuestros compartimientos. Mis damas y yo decidimos dar una pequeña caminata por el puerto; fue refrescante y gratificante. Te envió desde aquí esta pequeña carta.

Pd: puedes avisarle al vizconde Leonidas sobre la situación de su hermana, estoy segura de que debe estar preocupado.

Vicktoriya.

—Ya le he preguntado al capitán y dice que falta poco —Irina entra en la pequeña sala que compartimos, es el único lugar en donde no hace tanto calor, pero a la vez podemos ver algunos rayos de sol que se filtran por las gigantescas ventanas.

—¿Cuantos días más? —Pregunto agotada.

—Dos o tres para llegar al Sacro Imperio Romano Germanico; te lo prometo falta poco —Ella dice mientras cierra los ojos en un gesto de honestidad.

Tengo tres damas de compañía conmigo, fueron las que decidieron acompañarme a Francia sabiendo perfectamente que tal vez no volverían a sus hogares. Anastasia que ahora se encontraba durmiendo en su pequeño compartimiento es Griega y la hermana pequeña de Leon; cuando llegaron a Rusia a instalarse en la corte, ella tan solo tenía diez años, y desde ese momento dejando de lado que es mi dama de compañía, nos volvimos muy buenas amigas.

Irina, que es mi prima mayor por parte de mi Fallecido tio Dimitri, accedió al viaje porque quería conocer Francia y librarse de su madre, con la cual no tiene una muy buena relación, ella es la más fuerte de todas y siempre ha tenido una gran afinidad con los libros de política.

Yekaterina, o como nosotras la llamamos, Teri, es la más pequeña de todas, había acabado de cumplir catorce; las flores son lo que ella más ama, y ha completado prácticamente diez libros que contienen toda su colección de flores. También es mi prima, pero por parte de mi madre.

—Hola Vicky —Anastasia sale de su compartimiento.

Noto que tomar una siesta le ha sentado bien; hace unas horas estaba muy pálida y no tenía ese usual tono rosado en sus mejillas.

—Mi querida Nastya, estaba tan preocupada —Corro hacia ella y agarro sus manos que aún se encuentran un poco frías—. Veo que te encuentras mucho mejor. No te preocupes, el capitán dijo que en dos o tres días estaríamos llegando al puerto en el Sacro Imperio Romano Germánico, las cosas serán más sencillas en el viaje en carruaje.

—Todo sea por ti —Sonríe reconfortándome.

La preocupación sobre mis damas de compañía...

No.

Tus amigas.

Es que me aterra la idea de si ellas de verdad quieren estar aquí conmigo en este viaje. Todo lo que conlleva quedarse a mi lado es demasiado, tendrían que dejar su hogar y a sus familias.

Tal vez a Irina eso no le preocupaba mucho, pero las demás...

Nastya de seguro extrañaría mucho a su hermano y Teri a su madre. Por eso no quería obligar a ninguna a venir, pero ellas lo decidieron.