暗 | 𝘛𝘩𝘦 𝘌𝘥𝘨𝘦 𝘰𝘧 𝘛𝘰𝘯𝘪𝘨𝘩𝘵 ── 𝗞𝗮𝘁𝘀𝘂𝗸𝗶 𝗕𝗮𝗸𝘂𝗴𝗼💥

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 22

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Me he quedado sin Eijikî, sin Denki y también sin Bakugō… ¿Qué es lo que se supone que haga ahora? Es realmente tedioso tener que era estar sola. Denki estaba seguramente en una cita con Jiro, Eijikî con la estúpida de Momo y Katsuki pues… con su soledad era muy feliz.

Empuje fuertemente las puertas de la cafetería, seguramente habría pocas personas, pero nunca estaba de sobra llamar la atención o al menos no para mí.

Perfecto, esta situación no podía ser más perfecta. Eijikî estaba sentado sobre una de las mesas sujetaba a su Barbie pelinegra por la cintura mientras la devoraba por completo. Puse los ojos en blanco y decidí ignorarlos, me daban asco, camine hasta una de las últimas mesas que ahí habían, no estaba de humor para ver las asquerosidades que ese “Par de enamorados” hacían.

Saque mi pequeño aparato electrónico, comúnmente llamado también móvil…¡no tenía nada mejor que hacer! A los cinco minutos me aburrí de los juegos pre cargados que allí tenía, así que saque una hoja y un par de subralladores para comenzar a distraerme. Comencé a escribir en la hoja mi nombre una y otra vez, entre corazones, estrellas, flores y otras formas abstractas, haciendo que la hoja blanca que tenía empezará a llenarse.

— ¿Pero qué?— fue lo único que alcance a decir al momento que me arrebataron la hoja así de la nada, haciéndome rallar la mesa, tenía que decir que me asusto un poco esta acción.

— ¿Sé puede saber que es esto?— pregunto el pelicenizo de Bakugō, mientras se sentaba frente a mi viendo la hoja que prácticamente arranco de mis manos, está estaba un poco arrugada.

— Primero, ¿Qué demonios te ocurre?— era mi turno de usar la indiferencia —En segundo ¿Qué no era que no me querías cerca de ti?— fruncí mi ceño al ver su rostro divertido, es un completo idiota —Y tercero, no te importa— de la misma forma como lo había hecho él le arrebate la hoja.

—Nada, aun te quiero lejos de mí y no sé, puede que si me interese— contesto en orden cada una de mis preguntas, cosa que demostraba que realmente me escuchaba y eso me gustaba muy en el fondo o eso creía…

— ¿De verdad te interesa algo sobre mí?— pregunte bajando la hoja para después recargarme en la mesa, sabiendo perfectamente lo que me iba a responder.

—No— sonrió hipócritamente —Pero al imbécil de Mishuno le enfurece verme cerca de ti— volteo sobre su hombro para ver hacia donde estaban los “tortolos” que ya habían dejado de comerse mutuamente.

—Oh vamos Katsuki— reí —Deja de inventar escusas para estar cerca de mí— sonreí un poco divertida —No las necesitas, sé que te gusto— le guiñe un ojo, no tardaría en explotar y eso tenía que admitir que me gustaba mucho.

— ¿Qué?— soltó una carcajada —Por favor, solo quiero provocarlo y así tener un motivo para partirle la cara— tomo la hoja nuevamente para examinarla.

—Así que quieres provocarlo…— repetí y asintió con la cabeza aún mirando la hoja algo divertido al ver todo lo que había hecho y escrito, parecía bastante entretenido —Yo te ayudo— dije poniéndome de pie, camine hacia él quien me miraba algo extrañado sin entender lo que planeaba, su ceño fruncido se hacía bastante presente. Lo tome de la mejilla y me acerque a él uniendo nuestros labios. Estos se mezclaban tan suavemente, tan dulcemente. Cómo si estuvieran hechos el uno para el otro. Era increíble lo que provocaban en mí sus perfectos labios, esperaba o mejor dicho puede que deseará que él sintiera lo mismo. Me separe lentamente sus ojos se abrieron, no podía mentirme. Lo disfrutaba. Sonreí al momento que nuestras miradas se conectaron, di un corto beso sobre sus labios antes de tomar mi bolsa para dirigirme hacia la salida de la cafetería.