Capítulo 7

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Aquella mañana ambos se miraron, nerviosos y apenados, siendo sinceros ninguno recordaba muy bien lo que había ocurrido la noche anterior y eso no les daba ni un poco de tranquilidad, en sus rostros se reflejaba su angustia, no podían estar repitiendo la misma historia una vez más. Ella apartó su mirada de él, dirigiéndola hacia el techo.

Álvaro tomó sus zapatos y sin saber muy bien cómo moverse buscaba con sus ojos un sitio donde sentarse y poder terminar de vestirse, de manera que no incomodase a Itziar, unos segundos después terminó en uno de los sofás frente a la cama, aún sin camisa ataba sus zapatos. Ella lentamente se sentó en la cama y miró un momento el móvil, pronto tomó con firmeza la sábana que cubría su cuerpo antes de levantarse con la intención de ir al baño y tomar una ducha, tomó la sábana y caminó con dirección al baño mientras él la miraba discretamente y analizaba cada uno de sus movimientos, definitivamente estaba igual de nerviosa que él.

Ya había terminado con sus zapatos y debía encontrar su camisa, al levantarse se topó con los ojos grandes de ella mirándole muy de cerca. Estaba determinado a hablarle, aunque no sabía muy bien qué decir, por obra del destino o simple casualidad su móvil se escuchó, acabando con el contacto visual que habían mantenido y de alguna forma reduciendo la tensión.

- ¿Hola? -dijo cogiendo la llamada- hola cariño, ¿cómo estás?

Ella le miró y movió un poco su cabeza hacia los lados buscando su vestido o algo de su ropa.

- Sí, estoy en mi piso -soltó y la miró por un instante- No, estoy solo...

Al escucharlo ella frunció el ceño y dirigió su mirada hacia otra parte,  ¿Por qué mentía?, se preguntó ella, pronto entendió con quién debía estar hablando esa mañana que tuvo que recurrir a una mentira, aunque después de conocerlo bien sabía que no necesitaba una razón para recurrir a ellas. Las mentiras habían abarcado gran parte de su relación.

Itziar sujetaba con fuerza la sábana que cubría su pequeño cuerpo y tomando su vestido pasó al lado de él, dejando un leve golpe con su hombro, él la miró por arriba de su hombro y pudo verla entrar en el baño, antes de bajar su cabeza deseando seguirla.

Ella cerró la puerta tras de sí y dejó salir un suspiro mirándose en el espejo, pasó sus manos por su rostro despacio dejando caer la sábana y admirando su cuerpo entero desnudo, tenía unas leves marcas en su cintura al igual que las que pudo ver en la espalda de Álvaro, sonrió solo un poco para luego regañarse a sí misma por sus pensamientos. No sabía lo que había ocurrido con ellos la noche anterior, pero estaban seguros que la palabra "discreta" o "tranquila" no había sido parte de ella.

- Vale, te llamo después. -dijo él terminando la llamada.

Terminó de cerrar su camisa, tomó su reloj y vió el brazalete que traía ella la noche anterior, algo de pronto lo hizo tomarlo en sus manos y acariciarlo un segundo, recordaba aquel accesorio y la vez que ella adquirió dicha joya, le sorprendió tan solo un poco que todavía conservase el brazalete, ese que había conseguido en Tailandia años atrás. Sonrió para sí mismo e introdujo la pieza en su bolsillo antes de ir a la puerta de la habitación.

La habitación olía a ella, era su perfume, ese mismo que devoró la noche anterior con tanto deseo y aunque no le parecía algo correcto en ese momento deseaba recordar todo lo que hicieron aquella noche y si era posible, repetirlo. Tomó el llavín con su mano izquierda y miró una vez más hacia atrás, preguntándose si estaría haciendo lo correcto al dejarla ahí con tantas preguntas en la cabeza como las que tenía él.

Mientras, Itziar tomó una ducha rápida y salió envuelta en una toalla, salió con cuidado mirando hacia todas partes buscando un rastro de él, sin embargo él ya no estaba ahí, ella mordió su labio inferior mientras experimentaba una mezcla de emociones en su interior, no estaba sorprendida, él acostumbraba hacer eso.

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