Sex Instructor. || SASUHINA 🔞[✔️]

Chapter 15.

Género: Drama/Romance/Lemon.

Pareja: SasuHina.

"«Pensamientos»"

"Recuerdos"

Los Personajes de Naruto no me pertenecen, son de Kishimoto

Advertencia: Esta historia contiene escenas +18, leer bajo su propia responsabilidad.

Nota: Apartir de aquí y los próximos capítulos, el tipo de narración cambia a ser omnisciente (Tercera persona). Anteriormente solamente era narrado desde la perspectiva de Hinata ya que Sasuke realmente no sentía ni pensaba nada por ella, así que era algo irrelevante, pero por el bien del trama y para comenzar con el acercamiento de los protas lo considero necesario.

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Sasuke sonrió cuando se dirigía a casa. Se preguntaba si Hinata estaría esperándolo o si se había escapado.

Su propiedad estaba en un lote de un acre en las afueras de Japón. La había comprado antes de que los precios de la vivienda y la población hubieran explotado en la zona, se alegró de su semi-personalizada casa construida con algunos espacios para respirar. Y a una distancia suficiente de sus vecinos para que no pudieran escuchar los gritos de ella.

Los gritos de éxtasis. Le iba a enseñar a esa chica sobre el verdadero placer.

Estaba dispuesto a apostar dinero a que le estaba
esperando, tal y como le había ordenado. La forma en que le había obedecido sin cuestionamientos en su hogar le dijo un montón de cosas, incluyendo el hecho de que la pequeña era una sumisa nacida, hasta la médula.

En el momento en que entró en su hogar, su estómago
gruñó. Aroma a carne asada y verduras venía de la
cocina, junto con algo que a juzgar por su olor parecía ser arroz.

Él puso su maletín en el suelo y depositó las llaves en la mesa de entrada.

Pasó el rincón y sala de estar. Él se detuvo en la puerta de la cocina. Apoyó un hombro contra la pared,
cruzó los brazos sobre su pecho y sonrió cuando vió a la ojiperla poniendo la mesa.

Llevaba un delantal, pero tenía su trasero hacía su dirección por lo que tuvo una vista clara de el y sus muslos bien formados. No podía esperar a comenzar con el juego.

El cabello azul de la chica osciló y se volvió hacía él con un jadeo.

—B-bienvenido a casa, p-profesor... Yo-yo no le he oído entrar.

Él se apartó de la pared y se dirigió hacía ella. Se detuvó para observar el delantal que llevaba cubría sus senos.

—Y-yo no quería que la grasa me salpicará sobre la piel—Hinata le explicó cuando llegó hasta ella, un poco nerviosa.

—Eso es bueno. —el moreno se inclinó hacía abajo y rozó sus labios sobre los de ella. —No me gustaría que te lastimes.—la rodeó y le desató el delantal.—Pero ahora que estoy en casa quiero ver tu cuerpo.

Ella se estremeció bajo su tacto mientras le quitaba el
delantal y lo arrojaba sobre un mostrador.

El morocho consideraba el cuerpo de la ojiperla tan hermoso, que casi le quitaba el aliento.

—T-todo está sobre la mesa. —ella sonaba como si estuviera teniendo dificultades para hablar mientras él apretaba ambos pezones.—Y-yo... he hecho fajitas con arroz y vegetales.

—No huele tan mal.—Sasuke la soltó y miró los
enrojecidos pezones duros.—Tengo algo que me gustaría que uses.—Hizo un gesto a la mesa.—Toma asiento. Volveré enseguida.