Donde Todo Comenzó

Capítulo 45|Reencuentros

*Volvemos con T/n*:

Ya era 16 de abril, la boda de Jack y Jen, un día antes había comprado el vestido, era un vestido largo de color rosado bebé, unos tacones y un pequeño bolso, me tocaba ir con Aegan hasta el altar acompañando a los novios cuando empezaba la ceremonia, Jack antes me dijo que tenía una sorpresa para mí pero primero era su boda, estaba muy nervioso y me acerqué a él.

–Jackie te puedes calmar por favor?– dije.

–Nop– me dijo.

–Me estás poniendo nerviosa a mí– dije.

Se rió y le arreglé la corbata y el saco del terno.

–Estás guapísimo– dije.

–Gracias– me dijo alegremente.

–T/n!!– gritó Sue.

–Dios– dije– Que pasó?!

Naya y Sue me entregaron a mi pequeño sobrino que estaba llorando.

–No lo aguanto más– dijo Sue.

–Qué pasa pequeño Jay?– dije mirándolo.

–Es un pequeño monstruo– dijo Naya.

Jay lloró más fuerte y lo moví de un lado a otro en mis brazos.

–Naya silencio– dije– Vamos a ver a Jen.

–No!– dijo Sue– Nos va a matar.

Me reí y fuimos con Jen, tocamos la puerta y abrió Naya.

–Alguien busca a mamá– dije.

Me recibió a Jay y al instante se calmó y dejó de llorar.

–Cosita bonita– dije– Iré a ver a Jack si? Estás preciosa Jen.

–Gracias chiquis– dijo– Ven con tu hermano.

Fuí con Jack y al rato nos avisaron que Jen ya iba a salir, me acerqué al lado de Aegan que estaba guapo lo admito, lo extrañaba mucho y más ahora que me mudé a una de las casas que papá le dejó a mamá y vivía yo sola, bueno, vivía con mi bebé pero extrañaba a Aegan, nos acercamos y el hermano de Jen hizo la ceremonia, terminó todo y Jen y Jack furor a tomarse la foto y me dejaron a Jay, estaba dormido en mis brazos.

–Que no se despierte– dijo Mike– Es un pequeño muy llorón.

–Igual a su padre– dije riendo.

Jay se despertó por la risa y me sonrió.

–Hola pequeñín– dije– Que guapo que estás.

–Ya se despertó?– dijo Naya.

–Sip

Jen y Jack seguían en la seción de fotos y yo estaba cuidando de mi sobrinito, sentí una mirada en mí y voltee a ver, era Aegan, me estaba mirando mientras hablaba con sus hermanos, desvíe mi mirada cuando alguien me llamó.

–Mira quien está ahí– dijo Mike– Dame a Jay.

Se lo entregué y Mike me señaló a un lado con su dedo a un chico alto, con cabello negro y desordenado, vestido con un traje negro y guapo.

–No puede ser– dije emocionada– No puede ser!

–Claro que sí– dijo Mike.

–Sorpresa!– gritó Jack al lado mío.

Grité y corrí a abrazar al chico y él me recibió el abrazo.

–Que haces aquí?– dije con emoción.