Capítulo. 8

216 10 0
                                    

-Traes una carita Lanzani - dice burlón Tacho, lo miro con una cara de pocos amigos 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Traes una carita Lanzani - dice burlón Tacho, lo miro con una cara de pocos amigos 

-Cállate Tacho que estoy de humor, jamás creí que sería tan difícil cuidar de un bebe - digo tomando asiento en mi silla del escritorio -Santi duerme pocas horas, despierta cuatro o cinco veces por noche, es horrible 

Santi y Lali llevaba dos días en casa, Santi poco dormía, la casa era un desastre, Lali apenas estaba acomodando sus cosas, así que aún había varias cajas en la entrada de la casa, su habitación aún estaba patas arriba, la habitación de Santi era casi lo mismo, el mismo jueves pintamos las nubes y el nombre en la pared del pequeño, para que se secara y el olor a pintura se fuera lo antes posible, ayer comenzamos a acomodar la habitación de él comenzamos por la ropa, y los juguetes, aún nos faltaba acomodar algunas cosas, pero la gran mayoría ya estaba.  

Quise ayudarle a Lali a acomodar algunas de sus cosas, pero se negó, solo me dejó ayudarla a acomodar sus libros y me dio instrucciones específicas de como hacerlo 

-Es normal amigo, el pequeño apenas se está acostumbrando a ustedes, ¿Qué tal va la convivencia con la negrita esa? - frunzo el ceño y lo miro mal 

-No le digas así Tacho, tiene nombre y es Lali o Mariana, sobre tu pregunta, las cosas van, ella no confía en mí, es desconfiada, las cosas van fluyendo de a poco - digo encogiéndome de hombros 

-En mi mente recuerdo aquel patito feo - lo vuelvo a mirar mal, levanta las mano en son de paz - Ya, ya perdón

-Si la vieras ahora ni la reconocerías, y por favor deja de hablar mal de ella, suficiente la jodimos en el secundario como para que ahora la sigamos jodiendo 

-Bueno, entonces dejemos de hablar de esto y hablemos del restaurante, debemos de ir a hacer las compras, ya nos hacen falta, varias cosas, hice una lista, esta vez te toca a vos ir a hacerlas 

-Dámela, así me distraigo un poco - él hace una mueca 

-Jamás he entendido como es que te distrae el ir a hacer las compras- me encojo de hombros

-Me distrae, a mí me gusta, además el aire libre y eso es lindo - él niega con cara de horror 

-Tus formas de distraerte son raras, en fin la lista se la, deje a Romina, yo ya me voy, nos vemos al rato  

-Vale, bye - digo viéndolo salir de mí, oficina 

Me quedo reviso algunas facturas que se deben de pagar, miro la hora en el reloj que tengo en el escritorio, marcaban las 3: 50 de la tarde, tenía tras horas para ir a hacer las compras antes de que cerraran la granja en donde comprábamos los vegetales y varias de las cosas.

-Romina, me puedes dar la lista que te dio Tacho - digo ingresando a la cocina 

-Aquí está Juan - dice sonriente, la agarro 

Imaginemos ser una familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora