El profesor Mclovin, es el protagonista de los sueños húmedos, orgasmos, suspiros y pensamientos de todos los alumnos del instituto.
Un hombre cuyo físico retracta la viva imagen de un dios en su versión humana. Que entre todos sus alumnos, solo ha...
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Mi pulso se aceleró y mi corazón empezó a latir aceleradamente cuando escuché la grave voz del profesor Mclovin. Detrás de la puerta está el junto con Maddie y otras voces que he percibido, y me pongo a pensar ¿Que está pasando?
Volteo a ver a Max y él está igual de sorprendido que yo, pues la inesperada visita nos asustó.
Me separo de Max y me levanto lentamente del suelo, miro a mi alrededor en busca de algo para limpiarme, pero caigo en cuenta de que estamos llenos de pintura y jamas acabaremos.
>>¡Mierda!<<
—¿Abigail, estás ahí? - gritó Maddie y tocó mas fuerte la puerta
Yo retrocedí lentamente y sin querer tumbé un objeto con el que choqué.
—¡Ya te escuché, abreme! - gritó ella y no me dió mas que optar por abrir
Me acerqué a la puerta y la abrí, lo primero que vi fueron las serias miradas de impaciencia de cada uno de ellos. De pronto llevaron sus ojos a mi torso desnudo y solo cubriendo mis senos con un brasier, llena de pintura y después miraron adentro y visualizaron a Max.
El profesor Mclovin miró a Max con odio, después todo el papel y posteriormente a mi. Su cara paso de estar seria a una sorprendida.
>>Ojalá no piense otra pendejada<< pensé
—¿Que se supone que estaban haciendo?... - preguntó Maddie mirando todo
—Un retrato... - dije rápidamente - se supone que tenemos que llenar nuestros cuerpos de pintura y rodar en el papel.
—Que raritos son - dijo ella y pasó a la habitación
Después el profesor Mclovin sin dudar pasó y detrás de el, dos chicos morenos me miraron con pena y entraron.
—Te preguntarás por que venimos... - dijo Maddie
—Definitivamente
—Verás... ¿Recuerdas a los hijos de perra mal deformados del universo que te aventaron una bola de boliche?
Asentí
—Son estos dos - señaló a los chicos desconocidos y ellos bajaron la cabeza
—Oh... - me acerqué
Max se levantó rápidamente y aún medio desnudo se colocó a mi lado. El profesor Mclovin se nos quedó viendo y Max pasó una mano por mi cintura
>>¿Te gusta jugar con fuego eh Maxito?<< pensé
—Lo siento - dijeron al unísono y me miraron
—Bueno... explíquenme por que rayos me cayó una bola de boliche en plena pista de hielo - dije y me crucé de brazos, sintiendo coraje por recordar lo sucedido
