10. No puedo vivir sin ti, no hay manera.

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Iban pasando los días y yo iba estrechando la relación con mi profesor de EF. Al principio sólo hablaba yo y él me escuchaba y aconsejaba lo mejor que podía, pero nuestras conversaciones fueron girando hasta acabar conociendonos el uno al otro muy profundamente. Recuerdo el día en el que todo cambió, le estaba contando que Dani había venido el día anterior a mi casa disculpándose por todo y pidiéndome una oportunidad, le dije que necesitaba pensármelo y por una vez era cierto, dudaba. Alex, mi profesor, me dijo que ni se me ocurriera volver con él, que si lo hacía seria por encima de su cadáver. Le dije que no sabría si podia soportar estar sin Dani, que a pesar de todo le quería. Su respuesta aun resuena en mi mente a dia de hoy "Tu puedes estar con el chico que quieras, no pierdas tu tiempo con él". "Con el que quiera no..." le respondí, a lo que él me dijo "Si tienes loco a tu profesor puedes enloquecer a quien te propongas". Mi primera reacción ante sus palabras fue reírme. Creía que bromeaba, que sólo lo decía para levantarme el ánimo, pero no. A continuación, viendo mi incredulidad, añadió "Ya te lo demostraré". Yo no quise darle más importancia a sus palabras.

Mientras tanto, Dani y yo llevábamos ya cerca de un mes separados. Le echaba de menos si, pero me negaba a volver con él. Empecé a hablar con un chico de mi pueblo, amigo de Dani, que siempre me había llamado la atención. Hasta que un día quedamos y nos enrollamos. Estuvimos quedando un par de semanas pero no fuimos mas allá de los besos. Era un chico muy agradable, con el que se podia hablar, me gustaba estar con él, pero no era Dani.

Llegó el fin de semana, y un chico de mi pueblo amigo de Dani y de Juan, el chico con el que estaba quedando, celebraba su cumpleaños al que yo también estaba invitada. Me aseguraron que Dani no iba a ir asi que decidí ir acompañando a Juan. Una vez allí, después de cenar, empezamos todos a beber, tanto bebí que finalmente, cuando vi entrar a Dani perdí los papeles. Si de algo puedo arrepentirme sin duda es del daño que le hice ese dia a Juan, no se merecía aquello. Borracha perdida vi entrar a Dani y me metí al aseo llorando para que no me viera. Juan que no se había dado cuenta de su presencia vino a ver que me pasaba. No fui nada sensible con él, le dije que lo sentía pero que quería a Dani y que le había utilizado para poner a Dani celoso y que ahora veía que pasaba de mi y no podia perderle. Juan salio y le seguí para disculparme pero cuando vi que estallaba una botella de alcohol contra la pared me detuve y le dejé ir. Me centré en Dani y fui a buscarle, me dijeron que estaba arriba en una de las habitaciones.

Entré y le vi echado en la cama dándole la espalda a la puerta donde yo estaba. Había mas gente en la habitación pero cuando me vieron entrar todos se callaron y se fueron. Supongo que Dani se extrañó y se giró para ver que pasaba, cuando me vio a mi, supongo que con las peores pintas posibles después de todo lo que había bebido. Vi como resoplaba y se volvía a dar la vuelta, yo me acerqué a él despacio, me quedé de pie al lado de la cama hasta que no me pude aguantar más y le acaricié el hombro. Llevaba semanas sin saber de él, evitándole, sin sentirle cerca. Sus palabras hicieron arder mi corazón "No me toques", me dijo a la vez que me retiraba la mano. Yo me eché a llorar y me senté en una esquina de la cama sin rozarle. Lloré desconsoladamente mientras le pedía perdón, me dijo que me fuera con Juan que se iba a cabrear como me viera con él. Le dije que habia terminado con Juan, que solo lo había hecho para enfadarle, que le quería más que a nadie en el mundo. Aun así, Dani no daba su brazo a torcer, al final la mala de la película habia acabado siendo yo. Me tumbé en la cama a su lado, él seguía dándome la espalda y yo no podía parar de llorar. Al cabo de un rato, se giró, me miró fijamente, vi rencor en sus ojos pero tambien rastros del amor que aun sentía por mi. Finalmente me abrazó, tan fuerte que sentí que me salvaba, de todo, de todos, incluso de él mismo. No paré de llorar hasta que exhausta me quedé durmiendo entre sus brazos.

Amor a golpesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora