Capitulo 15: Pesadillas

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Leon estaba durmiendo en una cama de hospital, puesto que aún no habían terminado de sanar sus heridas de bala.

Era casi media noche, las enfermeras no estaban en el pasillo y habitación. La habitación estaba a obscuras a excepción de la luz de la luna, siendo la única luz en toda la habitación. Leon estaba durmiendo plácidamente, pero su tranquilidad se vio interrumpida debido a una pesadilla.

Estaba teniendo la misma pesadilla que ha estado teniendo últimamente, se había vuelto algo constante en sus sueños. La expresión de Leon mientras dormía cambió a una de terror y pánico. 

En sus sueños Leon siempre aparecía en el mismo lugar, un lugar oscuro pero iluminado por lo que parecía estrellas en todos lados y donde la gravedad era nula haciéndolo flotar como si estuviese en algún recóndito lugar del vasto universo.

En sus sueños siempre lo veía a él. Un hombre rubio de gran musculatura era el principal protagonista de sus pesadillas. El hombre siempre se ocultaba entre las sombras más oscuras de ese cósmico lugar.

En todas sus pesadillas, Leon siempre veía al hombre de espaldas. Por alguna razón aquel hombre rubio siempre le daba la espalda a Leon mostrando una brillante marca con forma de estrella sobre omóplato izquierdo (entre su hombro izquierdo y su cuello).

El hombre rubio siempre lo miraba fijamente en todos sus sueños y Leon siempre veía los cadáveres de Chris, Rebecca, Sheva, Ark, Claire y Sedrick, tirados ensangrentados a los pies de aquel hombre.

Los cadáveres se levantaban del suelo y caminaban hacia él como si fueran zombis como los que él había aniquilado en el pasado.

—Todo esto fue tu culpa.

—Eres un maldito cobarde que no es capaz de sacrificarse por otros.

Esas voces resonaban en su cabeza en medio de toda esa oscuridad, Leon sentía como si fuese a enloquecer mientras los que una vez fueron sus aliados lo devoraban vivo. Para después ver como sus amigos eran desechos como si fueran una hoja de papel mojada mientras Leon observaba con horror.

—¿Ja?...veo que tus amigos no son muy amigables — El hombre rubio por primera vez habló.

El tono de voz de ese hombre de alguna manera transmitía una paz, carisma y encanto aterradores.

—¿Q-quién eres tú? — Leon se mostraba aterrado, nunca antes se había mostrado tan aterrado en su vida como ahora.

—¿Yo? — El hombre habló con su tono de voz encantador —Yo no soy el que importa... Aquí el que importa eres tú.

El hombre se movía alrededor de Leon siendo cubierto por las sombras haciendo que Leon no pudiera ver su rostro completo solo su de sus ojos hacia abajo y su largo pero despeinado cabello rubio.

—Dime ¿tú crees en el destino? — Le habló a Leon al oído haciendo que un fuerte escalofrío recorriera todo su cuerpo y su piel se erizara —¿Cuál es tu verdadero propósito? ¿Proteger a todos esos patéticos o buscas algo más? Quizá algo que te ha marcado y desear enmendar o quizá obtener el reconocimiento que tanto has buscado para expirar tu culpa y tu soledad.

Leon estaba tenso y paralizado en su sitio sin poder moverse, a la merced de aquel escalofriante hombre. La sensación de no poder moverse por terror inundaba a Leon, su corazón latía muy rápido, su respiración era entrecortada y su cuerpo temblaba.

—¿Cuál es tu propósito? — El hombre puso su mano sobre el hombro de Leon acto que hizo a Leon tensionara cada musculo de su cuerpo —¿Qué es lo que realmente deseas?.

Leon Kennedy usuario de StandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora